No hay nada más suave y esponjoso que una toalla nueva, recién comprada. Pero con el paso del tiempo, este elemento suele volverse áspero. Cada lavado, el uso de detergentes y suavizantes, e incluso la acumulación de cal, hacen que la fibra pierda su tacto original.
El resultado es una sensación poco agradable, como si en lugar de secar exfoliaran la piel.
Aunque pueda parecer que esto no tiene remedio, un experto en textil del hogar mostró un método sencillo que permite recuperar la suavidad incluso en toallas de más de diez años. Y lo mejor, alcanza con un ingrediente que la mayoría seguro tiene en su casa.
Por qué las toallas pierden suavidad
Según explican desde el sector textil, con cada lavado se acumulan restos de jabón, suavizante y óxido de calcio en las fibras de algodón. Esta combinación forma una capa invisible que hace que el tejido pierda suavidad y elasticidad, dando lugar a una textura áspera.
El problema no es que la toalla esté vieja en sí, sino que está saturada de residuos que bloquean su superficie. De ahí que incluso una toalla de calidad pueda volverse rígida con los años.

El paso a paso del truco con vinagre
Este truco casero con vinagre blanco de limpieza no falla, es fácil de aplicar y capaz de destapar las fibras del algodón para que vuelvan a ser absorbentes y esponjosas.
- El procedimiento es muy sencillo.
- Preparar un litro de agua tibia, a unos 40 grados.
- Añadir 200 mililitros de vinagre blanco de limpieza.
- Sumergir la toalla durante 30 minutos.
- Pasado el tiempo, enjuagarla bien y meterla en la lavadora.
Otro truco es añadir también una taza de vinagre blanco en el depósito del suavizante del lavarropas durante el lavado. Así se eliminan los residuos que hacen que el tejido se endurezca.
Los expertos recomiendan no excederse con la cantidad de vinagre y aclaran que repetir el proceso puede mejorar los resultados, pero añadir más producto no acelera el efecto.
Lo esencial es que el vinagre actúe como desincrustante y libere las fibras. De esta manera, incluso toallas con años de uso recuperan parte de su suavidad, mejoran la absorción y prolongan su vida útil.