Reutilizar prendas que ya no se usan es una manera práctica de incorporar el reciclaje en la rutina diaria. Con algunos trucos caseros y manualidades sencillas, objetos que parecían inservibles pueden recuperar su utilidad en el hogar. Con un poco de creatividad, una camisa vieja puede transformarse en algo completamente nuevo y funcional.
Dos formas fáciles de reutilizar camisas viejas en casa

No tirar las prendas y reutilizarlas representa un pequeño triunfo para el ambiente. En el caso de las camisas, sus materiales y costuras permiten múltiples transformaciones.
Entre las opciones se encuentran: una funda para almohadón y una bolsa para pan o frutas.
Ambas opciones permiten sumar estilo al hogar y reducir el uso de plástico.
Alternativa 1: Funda de almohadón con una camisa reciclada
Transformar una camisa en funda de almohadón es una manera práctica de dar nueva vida a una prenda sin uso. Lo ideal es que sea de algodón, lino o alguna tela suave.
Materiales necesarios:
- 1 camisa de manga larga
- Tijera
- Alfileres
- Hilo y aguja o máquina de coser
- Un almohadón cuadrado (preferentemente de 40x40 cm)
Paso a paso:
- Extender la camisa sobre una mesa con los botones hacia abajo.
- Medir y marcar un cuadrado que cubra el almohadón.
- Cortar la tela por la marca, manteniendo el frente con la botonera.
- Unir los bordes con alfileres y coser los laterales, dejando la abertura de botones.
- Dar vuelta la funda, introducir el almohadón y abotonar.
Este diseño es sencillo, lavable y sustentable. Además, los botones permiten cerrar sin cremalleras ni accesorios extra.
Alternativa 2: Bolsa ecológica con mangas reutilizadas

Una bolsa de pan o frutas hecha con una camisa es ideal para evitar bolsas de plástico. Este proyecto también se adapta bien a camisas finitas o estampadas.
Materiales necesarios:
- 1 camisa (puede tener manchas o roturas en la parte inferior)
- Tijera
- Alfileres
- Aguja e hilo o máquina de coser
- Un cordón (opcional)
Paso a paso:
- Cortar las mangas de la camisa a la altura del hombro.
- Unir ambas mangas por los extremos abiertos para formar una bolsa.
- Coser todo el contorno, dejando un lado abierto para la boca.
- Si se desea, doblar el borde de la abertura y hacer un pequeño dobladillo para pasar un cordón ajustable.
El resultado es una bolsa original, liviana y perfecta para el almacenamiento de pan, frutas o verduras.