El 26 de agosto se conmemora el Día Internacional contra el Dengue, una fecha clave para concientizar sobre la importancia de la prevención y el control de esta enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo.
Este día subraya la necesidad de tomar medidas preventivas y promover la vacunación como herramientas clave para reducir su incidencia.
“Argentina es uno de los países que ha sido afectado gravemente por esta enfermedad, tan solo a principios de este año el país experimentó un importante brote. Si bien, los casos han disminuido, es fundamental estar informados sobre esta enfermedad ya que puede presentarse de forma sintomática o asintomática. En este sentido, el conocimiento de los síntomas es esencial: la fiebre, dolor muscular y de articulaciones, cefalea, náuseas, vómitos y diarrea son signos comunes a tener en cuenta para distinguir y diferenciar el dengue de una gripe convencional”, señaló el doctor Ricardo Daniel Tapia, médico de Familia de Boreal Salud (MP 4.288 - MN 155.873).
Bajo este contexto, es importante considerar algunos aspectos clave para prevenir esta enfermedad:
- Cambiar frecuentemente el agua de los bebederos de animales y de los floreros.
- Tapar los recipientes con agua, eliminar la basura acumulada en patios y áreas al aire libre.
- Utilizar repelentes en las áreas del cuerpo que están descubiertas.
- Usar ropa adecuada, camisas de manga larga y pantalones largos.
- Usar mosquiteros o toldillos en las camas, sobre todo cuando hay pacientes enfermos para evitar que infecten nuevos mosquitos.
- Rellenar con tierra tanques sépticos en desuso, desagües y letrinas abandonadas.
¿Qué papel tiene la vacunación contra el dengue?
“El estudio Tides, un ensayo diseñado para evaluar la eficacia, seguridad e inmunogenicidad de un esquema de vacunación de dos dosis, de la vacuna experimental para el dengue de Takeda (TAK-003), alcanzó el objetivo primario de medir la eficacia de la vacuna. La aplicación de este inmunizante logró prevenir el 84% de las hospitalizaciones y el 61% del dengue en general, sin riesgo de seguridad significativo detectado durante los tres años posteriores a la inoculación”, agregaron desde Boreal Salud.
Este estudio demuestra que la vacuna tiene una eficacia significativa para reducir la incidencia de dengue en personas previamente expuestas al virus.
Sin embargo, la vacunación es un proceso que debe realizarse bajo ciertas especificaciones. Los profesionales recomiendan que esta debe ser aplicada desde los 9 años hasta los 16 años de edad, aunque puede ser sin límites de edad, pero los estudios demuestran poca eficacia clínica en personas mayores de 17 años.
Por otra parte, está contraindicada en embarazadas, mujeres lactantes, personas inmunosuprimidas y en menores de 9 años, ya que pueden aumentar el riesgo de hospitalización y enfermedad grave si se infectan con dengue en el futuro.
La educación sobre la prevención y la vacunación es esencial en la lucha contra el dengue. Este día ofrece una oportunidad valiosa para reforzar el compromiso de la sociedad en la lucha contra el dengue.
A medida que el dengue sigue representando una amenaza, la combinación de educación, prevención y vacunación se convierte en la estrategia más efectiva para reducir su impacto a nivel global.
