Aunque el chimichurri y el limón son clásicos en los asados, existe un ingrediente “secreto” que los chefs utilizan cada vez más para llevar el sabor de la carne a otro nivel. Se trata de la manteca.
La manteca no solo aporta suavidad y sabor a la carne, sino que también permite incorporar otras hierbas y especias.
Por ejemplo, al combinarla con romero, ajo y perejil, se crea un aderezo que realza el gusto de la carne a la parrilla.
La manteca, ingrediente secreto para los asados
- La manteca también ablanda la carne durante la cocción.
- Al aplicarla sobre la carne caliente, la manteca crea una capa que ayuda a retener los jugos, resultando en una textura tierna y jugosa.
- La manteca también contribuye a la formación de una costra dorada en la superficie de la carne, mejorando tanto su sabor como su apariencia.
¿Cómo usar la manteca en tus asados?
Sigue estos simples pasos:
1. Prepara una manteca saborizada: derrite la manteca y mézclala con ajo picado, hierbas frescas y sal.
2. Aplícala durante la cocción: con un pincel, cubre la carne con la manteca mientras se asa.
3. Úsala como toque final: una vez cocida la carne, agrega un poco de manteca sobre el corte caliente para intensificar su sabor.
Con estos consejos, tus asados alcanzarán un nuevo nivel de sabor y textura, sorprendiendo a tus invitados con carnes tiernas, jugosas y llenas de sabor.