Una mujer mayor es asesinada a golpes y su cuerpo es arrojado embolsado a la vera de un arroyo. Un empresario aparece maniatado y muerto tras un robo en su cabaña. Una empleada de peaje fallece atropellada por un auto conducido por ladrones que escapan de la Policía. Un joven muere apuñalado tras una pelea con vecinos en la calle. Otro joven es ejecutado a balazos por la espalda por matones que escapan en un auto. Otro hombre es asesinado tras una pelea a los tiros en otro barrio. Un joven cae muerto a puntazos en una riña. Una mujer es ejecutada de un escopetazo por su pareja.
Ocho personas han sido asesinadas en los últimos siete días en la provincia de Córdoba. Ocho vidas apagadas en el marco de una creciente violencia que vuelve a encender las alertas. A la par, numerosos heridos, ya sea por disparos o por heridas de arma blanca, que han terminado en hospitales. Los casos criminales han ocurrido tanto por violencia urbana como por inseguridad y violencia de género.
Con los ocho homicidios de los últimos días, ya son al menos 70 los crímenes registrados en lo que va del año en la provincia de Córdoba. De ese total, 36 homicidios ocurrieron en la Capital; el resto, en distintos puntos del interior.
La cifra genera inquietud y preocupación si se tiene en cuenta el leve y sostenido incremento en la cantidad de crímenes en los últimos años en la provincia. Según datos de La Voz, basados en registros propios e informes oficiales de Provincia y de Nación, en 2023, se contabilizaron 116 casos en la provincia, mientras que en 2022 fueron 97, al tiempo que en 2021, 88 casos.
En 2020, el año de la pandemia y cuando las circulaciones se vieron restringidas por el Covid-19, la cantidad de asesinatos fue de 114. En 2019, aquella lejana prepandemia, la cifra de muertes violentas había sido 122.
A nivel nacional, Córdoba está abajo en el listado de las provincias con más asesinatos, teniendo en cuenta las tasas criminales. Córdoba tiene una tasa promedio de tres crímenes cada 100 mil habitantes.
En 2023, los tres distritos más violentos fueron Santa Fe (tasa de 11), Chaco (de 5) y Chubut (de 4,6).
Como contrapartida, Córdoba ocupa lamentablemente muy altas posiciones en el ranking nacional de la inseguridad en materia de delitos contra la propiedad.
“Habíamos tenido 40 días sin homicidios y ahora se ha dado esta serie de casos que obviamente preocupa. Todo esto es muy dinámico. Es algo que preocupa y ocupa. Se trabaja para revertir esto”, señaló una alta fuente del Centro Cívico.
“Lo que se está viendo, y mucho, es una alta incidencia de las drogas en los hechos. Muchos autores de ataques estaban bajo efectos de sustancias”, añadió otro alto vocero.
Desde la Policía señalan que, en la mayoría de los homicidios, se detuvo a los supuestos autores, quienes están con causas firmes en su contra.
Violencia urbana, principal causa
Como viene sucediendo desde hace largo tiempo, la principal causa de muerte violenta en Córdoba sigue siendo la violencia urbana. Se trata de ese fenómeno criminal que engloba peleas, venganzas, ajustes y represalias no sólo en la ciudad, sino también en varios puntos del interior.
Se trata de resoluciones de “conflictos” interpersonales, en la mayoría de los casos, entre conocidos. Estos crímenes, por lo general, son producto de escaladas de violencias. Lo peor es que muchas veces, tras el crimen, se generan nuevas violencias.
En lo que va del año, ya se cometieron al menos 34 asesinatos en el marco de la violencia urbana. La mayor parte de esos casos se registró en la Capital.
Los casos tuvieron como víctimas a varones jóvenes en su mayoría. En la última semana, se registraron tres homicidios de esta índole (dos en Capital y otro en Villa Carlos Paz).
A la hora de dar muerte, en la mayoría de los casos se utilizaron armas de fuego. Esto vuelve a dejar en evidencia la alta portación de pistolas y de revólveres en manos de cualquiera en la provincia, al tiempo que desnuda con qué facilidad muchos jóvenes acceden a estos elementos a pesar de los secuestros de armamentos que realiza la Policía.
Uno de los grandes casos impunes de violencia urbana fue un joven ultimado por desconocidos que arrojaron su cuerpo cerca de un puente en Capilla de los Remedios.
Inseguridad, segunda causa
La inseguridad aparece como la segunda causa de muerte violenta en Córdoba desde hace años. Esta realidad continúa este 2024: al menos 18 personas murieron como resultado de casos vinculados a robos.
De ese total, al menos 12 fueron víctimas propiamente dichas de asaltos tanto en calles como en domicilios. Gran parte de esos casos tienen a los sospechosos encarcelados y con causas firmes en su contra.
En paralelo, hay seis sospechosos de robo ultimados principalmente a manos de policías que estaban de franco y resistieron robos callejeros.
El último episodio de inseguridad fatal fue el de la escritora Dora Cappenberg, en Capilla del Monte. Fue golpeada en un asalto en su casa y su cuerpo fue arrojado (embolsado) en San Esteban. Por ese crimen fueron detenidos dos jóvenes, entre ellos, un inquilino de la víctima.
En este sentido, ya son seis los casos de adultos asesinados en sus domicilios en el marco de asaltos cometidos presuntamente por personas a quienes conocían de antemano. Dicho de otra manera: de la confianza se pasó a la traición, según las sospechas judiciales.
Cabe señalar que, por sus características y por sus derivaciones, uno de los asesinatos más gravosos ocurridos en el marco de un hecho de inseguridad fue el que tuvo por víctima a Sebastián Villarreal, el vecino ultimado a balazos por motochoros cuando se iba a trabajar, en barrio Yofre Norte, en febrero pasado.
Sebastián fue víctima, según la Justicia, de una banda de jóvenes motochoros dedicados a asaltar a vecinos.
Continúa la investigación por el crimen de Gabriel Enrique Di Noto (54), un contador e inversionista que apareció asesinado jornadas atrás en una vivienda de Villa Carlos Paz. Se sospecha que fue víctima de un ardid por parte de una mujer que habría dejado pasar a hombres para que lo asaltaran y lo mataran.
Violencias de género y familiar
En lo que va del año, ya se han registrado al menos siete femicidios (uno de ellos fue un caso vinculante: un padre mató al pequeño hijo de su ex para vengarse). El último femicidio se registró en la ciudad de Cruz del Eje y el sospechoso fue detenido.
En paralelo, se llevan cometidos al menos nueve casos de violencia familiar en la provincia.
El caso que más estrépito causó es el de Susana Montoya, quien fue muerta a golpes en su casa de Ampliación Poeta Lugones. Por el crimen está preso su hijo, Fernando Albareda, cuyo padre es un policía desaparecido en la dictadura.
Con Estefanía, ya son siete los femicidios ocurridos en la provincia en el año
Se llamaba Claudia Estefanía Salguero, tenía 30 años y era madre de tres chicos. El pasado martes, fue asesinada de un disparo de escopeta por parte de su pareja, quien alcanzó a escapar, aunque fue detenido.
El hombre había salido de la cárcel recientemente tras cumplir una condena por venta de drogas.
Jorge Lucas Emanuel González, de 40 años, fue imputado por homicidio doblemente calificado por mediar una relación de pareja con la víctima y por mediar violencia de género, toda vez que es agravado por el uso de arma de fuego.
Así lo dispuso el fiscal de Instrucción y Familia de Cruz del Eje, Nelson Lingua, quien dispuso que González quedara alojado en el establecimiento carcelario Andrés Abregú, la cárcel de aquella ciudad.
Con el crimen de Estefanía, ya son siete los femicidios ocurridos en la provincia de Córdoba en lo que va del año.
Según informó el Ministerio Público Fiscal, todo ocurrió el pasado martes aparentemente a raíz de una discusión que la pareja habría mantenido. En esas circunstancias, el individuo tomó un arma larga y disparó contra su pareja.
El impacto le dio en el tórax.
Acto seguido, escapó corriendo.
La víctima alcanzó a ser trasladada hasta un centro de salud de la zona, pero, dada su gravedad, fue derivada al hospital San Roque, de Córdoba capital.
En este centro de salud, el cuerpo médico intentó salvarla. Sin embargo, el trabajo no dio resultado.
El acusado escapó corriendo del domicilio, pero fue detenido por patrullas policiales, a las pocas cuadras, luego de llamados efectuados por vecinos a la comisaría.
Fue rápidamente reducido y llevado a una dependencia judicial.
En el marco de los procedimientos, los policías secuestraron el arma de fuego usada en el crimen.
Desde el MPF se indicó que González había recuperado la libertad recientemente tras haber cumplido una condena por infracción a la ley nacional de drogas, que había sido dictada en 2021. La fiscalía continúa con las tareas investigativas para el esclarecimiento del hecho.
Los tres hijos de la mujer quedaron bajo el cuidado de familiares.
Los otros femicidios
Este año, por violencia machista, fueron cometidos otros seis femicidios. Se trata de los casos que tuvieron por víctimas a Olga Bernardi, asesinada por su hijo en Alta Gracia; a Eugenia Villarruel, ultimada por su padre en La Carlota; a Ana María Loza, quien fue atacada en Villa del Rosario por su expareja; a Verónica Heredia, asesinada en barrio General Paz por su expareja, y a Catalina Gutiérrez, atacada y asesinada en la Capital por un amigo de la facultad, quien ya confesó.
A este listado trágico, se agrega el caso del pequeño Mateo, de 2 años, quien fue asesinado por su padre en la localidad de General Levalle.
A todo esto, hay un episodio bajo sospecha. Se trata del caso de Yanina Trigo, quien fue hallada muerta tras un incendio en su casa en la ciudad de Villa Nueva.
Para la fiscalía, ese incendio habría sido intencional. En ese marco, continúa la investigación con la sospecha de un supuesto femicidio.
Los otros crímenes: ladrones en fuga y que causan dramas
Detenidos en la cárcel de Bouwer y con la acusación de homicidio simple. Esa es la situación penal, por estas horas, de los dos hombres acusados de haber sido quienes atropellaron y mataron a una empleada de una cabina de peaje, días atrás, en la autopista Córdoba-Rosario a la altura de James Craik.
La víctima fatal fue Analía de los Ángeles Molina, de 33 años.
Todo sucedió el pasado sábado 14, cuando efectivos de la Policía Caminera detuvieron el paso de un VW Polo en la autopista. En medio del control, el conductor arrancó a toda velocidad. En esas circunstancias, al cruzar las cabinas de peaje, el vehículo atropelló a la joven trabajadora, quien justo cruzaba caminando.
Luego se sabría que llevaba dinero de la recaudación hacia las oficinas de administración.
A causa del fortísimo impacto, la mujer murió.
Los delincuentes escaparon y abandonaron el vehículo a unos 1.500 metros. Acto seguido, se internaron en un campo.
La búsqueda policial no dio resultados. Al revisar el rodado, los uniformados descubrieron que el coche había sido sustraído semanas atrás en Córdoba capital y que llevaba patentes truchas.
A las pocas horas, y mientras la investigación intentaba dar con pistas de los prófugos, dos hombres se presentaron horas después en los Tribunales de la ciudad de Villa María. Se trataba de Luciano Lario, de 30 años, con residencia en barrio Marqués de Sobremonte, de Córdoba, y de Jonathan Campos, también de 30, con domicilio en barrio San Roque, de Córdoba.
Ambos quedaron detenidos a disposición de la Fiscalía de Oliva.
Si bien no hubo información oficial ni de esa fiscalía ni del MPF, fuentes con acceso a la causa señalaron que los dos acusados fueron imputados por homicidio simple.
Robos y siniestros graves
Este caso se agrega a un fenómeno criminal que lamentablemente no deja de repetirse en la provincia de Córdoba: los dramas viales ocurridos por ladrones que escapan tras haber cometido un robo o bien que manejan a altísimas velocidades en el marco de persecuciones.
En lo que va del año, ya se produjeron las muertes de al menos cuatro sospechosos de robos en el marco de siniestros viales cuando escapaban de la Policía.
En tres casos, iban en moto. En otro, el sospechoso escapaba en un automóvil en el interior de Córdoba.