El fiscal de cámara Martín Berger admitió que no podía seguir acusando a Carlos Rubén Soria (74) al no poder salir del estado de “duda insuperable” y pidió su absolución por el crimen de quien había sido su amiga, Patricia Rosa “Turca” Saad (65).
El crimen fue cometido el 16 de julio de 2018, producto de fuertes golpes a la víctima, cuyo cadáver fue hallado en el interior de su vivienda de Tanti, donde la mujer alquilaba máquinas viales y ofrecía préstamos a conocidos de la población serrana.
Soria fue detenido en agosto de 2023, cuando se comprobó que restos de ADN hallados en la escena del crimen le pertenecían. Aparentemente, el acusado habría tenido una relación afectiva con la empresaria.

El juicio finalizó este miércoles en Córdoba con la absolución por la duda, por decisión unánime del jurado popular reunido en la Cámara 3ª del Crimen, donde actuaron como vocales técnicos Gustavo Ispani, Leandro Quijada y María de los Ángeles Palacio de Arato.
Al no poder confirmarse la acusación y no poder avanzar con los testigos, el fiscal Martín Berger manifestó que se mantenía la duda sobre lo que sostenía el expediente y en su alegato pidió la absolución del acusado.

Sosa fue defendido por el abogado penalista Milton Parola, quien venía sosteniendo la inocencia de su asistido, indicando que la prueba no lo comprometía y que el ADN en la casa de la víctima tenía que ver con la relación que habían tenido. De igual modo, aseguró que no estaba clara la información de las antenas de telefonía celular sobre la ubicación de Sosa al supuesto momento del crimen.
El ADN en una toalla y la información de la geolocalización eran las dos pruebas principales que habían involucrado a Sosa con el alevoso crimen.
Los querellantes particulares en representación de familiares de Saad, tampoco avanzaron con la acusación.
El desfile de testigos y sus declaraciones no aportaron claridad respecto de la presunta participación de Sosa en el crimen. Sólo se sostuvo el estado de duda.

La acusación en contra de Sosa era “homicidio calificado por alevosía” y terminó con la absoución. De haber sido hallado culpable, le correspondería una única condena de prisión perpetua.
Ahora, el expediente regresa a la Fiscalía de Carlos Paz, donde deberá profundizarse la investigación en búsqueda del responsable de este alevoso homicidio.
El crimen
El lunes 16 de julio de 2018, preocupada porque no respondía sus llamadas telefónicas, una amiga de “la Turca” llegó hasta la vivienda y la encontró tendida en el piso de la cocina. La habían golpeado hasta matarla con un hierro o un objeto de similares características que nunca apareció. Según el primer informe de la autopsia, la mataron de al menos 11 golpes en la cabeza, con un objeto contundente que nunca apareció.
Patricia se dedicaba a la construcción, fue capataz de obras en el municipio y alquilaba máquinas para movimiento de suelo.
En la casa no se encontraron vestigios de que se hubiera tratado de un homicidio en ocasión de robo, ya que los investigadores hallaron todo en orden, sin que faltara ningún objeto de valor.

En aquel momento, su hermano Jorge Isaías Saad Alekian declaró: “De la forma como ha sido, parece un ajuste de cuentas y parece que no le han robado. En la mesa había una billetera con bastante dinero y su celular”.
“Al parecer entró alguien que la conocía porque no robaron nada, no forzaron las puertas. Hicieron lo que hicieron y se fueron”, agregó.
Y completó con una frase que dejó pensando a más de uno: “Sé que Patricia vivía con mucho miedo porque mucha gente que se acercó a hablar conmigo me lo manifestó. No sé el porqué del miedo. Pero se ve que tenía mucho”.
Saad era empresaria y alquilaba máquinas viales en Tanti. Además, prestaba dinero a gente conocida y entre ellos a Sosa, quien sostenía una deuda elevada en dólares que a ella le costaba cobrar. Ambos habrían tenido una relación afectiva.
Tras las pruebas de ADN que detectaron rastros genéticos de Sosa, fue detenido en agosto más de 5 años después, en agosto de 2023. Estuvo detenido ocho meses en la cárcel de Bouwer y luego, por razones de salud, le concedieron la prisión domiciliaria durante los últimos 13 meses.