El Tribunal Penal Económico N°3 comenzará a juzgar este miércoles a uno de los clanes más importantes en el negocio del narcotráfico trasnacional: los Loza, cuyo núcleo nació de los tres hermanos salteños Erwin (42), Valdemar (57) y José Gonzalo (55), quienes están acusados de lavar unos 800 millones de pesos producto de sus exportaciones de cocaína a Europa.
Según la acusación, con el dinero de la droga compraron hoteles, edificios de cocheras, mansiones, autos de lujo y hasta la Ferrari F355 que fue de Diego Maradona, publicó el diario Clarín.
Pese a haber entrado al país, a través de un aceitado sistema de mulas, unos 15 millones de euros (entre los años 2008 y 2018) nadie los había detectado hasta que su financista, Diego Xavier Guastini (45), los entregó a la Justicia.
Guastini habló por primera vez en octubre de 2018. Lo hizo bajo la figura de “arrepentido” (o “imputado colaborador”) para obtener una pena menor en una causa que se le había abierto por contrabando de divisas.
“Dolarín” -como algunos llamaban a Guastini- manejaba una red de mulas que entraban dinero de Europa en valijas y estaba al servicio de bandas barco, como los Loza o los Atachahua. Sus principales contactos eran en la Secretaría de Inteligencia (SI).
Debido a las restricciones sanitarias por la pandemia de Covid-19, el juicio (transmitido por YouTube) se hará de manera remota. En principio estan planeadas audiencias los lunes y miércoles, más alrededor de 100 testigos.
Entre los acusados principales están Erwin “Nene” Loza (42) y sus sobrinos Gonzalo Loza (alias “Junior”, 25) y Alan Loza (27), hijos de José Gonzalo.
Aunque José Gonzalo fue detenido en 2018 en España -donde vivía-, allí murió en 2019. Por eso sólo sus hijos, Alan y Gonzalo (“Junior”) estarán en el banquillo de los acusados.
A su vez, en este juicio no está acusado Valdemar Loza, que en 2019 fue condenado por la Justicia federal de Salta a 15 años de prisión en otra causa de 2017 iniciada por el secuestro de más de una tonelada de cocaína en un galpón de Tapiales.
A Valdemar se lo detuvo en el operativo Ave Rapaz, famoso porque luego se descubrió que los policías federales a cargo de los allanamientos le robaron al narco unos 600 mil dólares. En total 11 policías esperan su juicio por ese robo.
Sin Guastini
El juicio contra los 11 acusados de integrar el clan Loza, con Erwin a la cabeza, tendrá sus particularidades, de acuerdo con el medio porteño.
Tal vez la más llamativa sea que el hombre que los entregó, y que como arrepentido habló dos veces contra ellos, no estará para ratificar sus dichos: Diego Guastini fue asesinado por sicarios el 28 de octubre de 2019 luego de salir en su Audi de su casa de Quilmes rumbo al microcentro porteño, donde tenía sus oficinas.
Sus declaraciones fueron debidamente grabadas (como marca la ley) por la Justicia. Guastini sostuvo que él personalmente ayudó a lavar 15 millones de euros del clan y que Erwin Loza era el dueño de la cocaína secuestrada en 2013 en el operativo Leones Blancos.
Este último no es un dato menor ya que se trató de una tonelada de droga que Guastini entregó a la Policía Bonaerense, la cual se habría robado la mitad para comercializarla en la Costa Atlántica. Para la Justicia federal de San Isidro, detrás de esa maniobra, además, estuvo el fiscal Claudio Scapolan.
Guastini tenía mucha información y la aportó para zafar, incluso reveló que los Loza se comunicaban a través de un sistema encriptado llamado Encrochat y explicó que, por eso, sus mensajes no habían podido ser interceptados.
Un testigo clave, asesinado y con un video como legado, tampoco es el único dato curioso del debate. Según pudo revisar Clarín, Alan y Gonzalo Loza tienen como defensor a David Hamwee (47), un abogado que aparece en importantes causas de contrabando al punto de que él mismo fue condenado en una de las más conocidas.
En diciembre de 2015 le impusieron la pena de dos años y medio de prisión en suspenso por el intento de contrabando de 57 kilos de cocaína en biodiesel. La condena luego se aumentó a cuatro años y medio en Casación. Actualmente está apelada en la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
