Hacía tres meses que Américo González (72 años) había desaparecido de su vivienda de la localidad de Berrotarán, en el departamento Río Cuarto, al sur de la provincia de Córdoba.
Los operativos de búsqueda y rastrillajes por la zona no daban resultado.
Sin embargo, la investigación judicial fue avanzando lentamente hasta que finalmente aparecieron las peores noticias.
En el mediodía del jueves, bomberos voluntarios hallaron restos del cadáver de un hombre enterrado en el patio de una vivienda de la misma población.
Los restos fueron remitidos para la correspondiente autopsia. El objetivo es determinar si se trata del hombre que era buscado y cómo fue asesinado.
Desde el Ministerio Público Fiscal (MPF) se confirmó que una mujer que vivía en esa casa fue inmediatamente detenida.
Por orden del fiscal Daniel Miralles, a cargo de la causa, quedó imputada por el supuesto delito de homicidio simple. No se descartan más detenciones.
La mujer era conocida del propio González.
Desaparición y crimen
El 19 de junio pasado, se perdió todo rastro de Américo Guillermo González en Berrotarán.
A las pocas horas, su rostro y pedido de paradero comenzaron a circular por la población y zonas cercanas en busca de algún dato que pudiera echar luz sobre lo sucedido.
El caso recayó en investigadores de la Departamental de Policía de Río Cuarto que comenzaron a investigar el caso bajo directivas del fiscal Miralles. Entre las primeras medidas se analizaron filmaciones de cámaras de seguridad (tanto de la zona como de las afueras del pueblo) y se tomaron testimonios, además de ordenarse rastrillajes en la zona.
A la pesquisa se sumaron detectives de la Dirección de Investigaciones Operativas (DIO) de la Policía Judicial. Se realizó un arduo trabajo basado en el análisis de comunicaciones.
Bajo un estricto hermetismo, el caso fue avanzando y, finalmente, este jueves hubo novedades.
En el marco de la causa se investigaron sus relaciones personales y comerciales.
En ese punto, trascendió que se analizó una supuesta venta de un campo de la víctima. De hecho, se hicieron allanamientos en un domicilio de La Carlota y hasta se habrían secuestrado elementos vinculados a la causa.
La pesquisa siguió avanzando hasta que, con un cúmulo de indicios y pruebas, la fiscalía ordenó un allanamiento en una vivienda de la misma Berrotarán.
Bajo tierra
En la tarde de este jueves, Berrotarán se vio desbordado por policías, bomberos, cuerpos especiales de búsqueda y funcionarios judiciales.
En ese marco, se allanó una casa de calle España 124.
Un perro del equipo de búsqueda (K9) de los bomberos de Río Tercero “marcó” un lugar en el patio de esa vivienda. Así fue que los efectivos se pusieron a cavar y, al cabo de pocos minutos, se dieron con el espanto enterrado: los restos de un hombre.
La búsqueda continuó y se hallaron otros elementos como un machete , un martillo y un bisturí.
Todos los elementos serán sometidos a peritajes dispuestos por la fiscalía.
Mientras tanto, crece la conmoción en Berrotarán.
La localidad ya se había visto sacudida semanas atrás tras el paso de una banda de poliladrones que había cometido un violento golpe comando en la vecina población de Elena.
