A cinco días de la detención de Alicio Osvaldo Dagatti, empresario frigorífico y presidente del club Estudiantes de Río Cuarto, el Ministerio Público Fiscal dio a conocer oficialmente las razones de la pesquisa en su contra.
A través de un comunicado, el fiscal de Delitos Complejos N° 1 de Córdoba, Enrique Gavier, confirmó que cuatro personas de Río Cuarto fueron privadas de su libertad, el 4 de diciembre, “en el marco de las investigaciones vinculadas al ingreso clandestino de elementos prohibidos, tales como teléfonos celulares, alcohol, estupefacientes, a los diferentes establecimientos penitenciarios de la provincia de Córdoba”.
Los cuatro imputados son Alicio Osvaldo Dagatti (60), “dueño del frigorífico Livorno”; Alicio Ignacio Dagatti (29), hijo de Alicio Osvaldo; Luis María Mina (48), empleado de Livorno con un alto cargo administrativo, y Maximiliano Gastón Irusta (23), empleado del transporte que llevaba los productos de Livorno a la cárcel.
La Fiscalía de Delitos Complejos informó que todos los nombrados fueron imputados como supuestos autores del delito de asociación Ilícita en los términos del artículo 210 del Código Penal y se encuentran alojados a disposición exclusiva de la Fiscalía de Instrucción en el Establecimiento Penitenciario n° 1 de Bouwer.
Alicio Dagatti es nativo de General Deheza e hizo carrera empresarial a partir de una carnicería que instaló en Río Cuarto. En los últimos años, se convirtió en propietario de los frigoríficos Livorno (Las Higueras), Arezzo (Río Tercero) y Agropecuaria Transur (Alcira Gigena), cada uno de ellos a cargo de cada uno de sus tres hijos. También creó Canal Quatro en Río Cuarto, luego compró acciones del diario Puntal y construyó un barrio privado residencial (Aguas Claras).
Desde 2015 es presidente de la Asociación Atlética Estudiantes, club de fútbol que durante su gestión creció en obras y logró ascender a la Primera Nacional.
Restará ver qué tienen que decir cuando sean indagados.
Droga y celulares en el camión frigorífico
La investigación se originó hace un año, cuando, el 26 de diciembre de 2023, agentes del Servicio Penitenciario de Bouwer frenaron para requisa un camión que entraba a la cárcel de Bouwer. El vehículo era del frigorífico Livorno, propiedad de Dagatti. Entre la carne, había marihuana, cocaína, celulares, alcohol y psicofármacos que estaban destinados a ser ingresados a los pabellones, según se sospecha.
En total, se interceptaron casi dos kilos de picadura de marihuana, 14 gramos de cocaína, una veintena de psicofármacos y una bolsa térmica con una bebida alcohólica. Además, siete modernos celulares, siete cargadores, siete plaquetas, una veintena de cables USB y hasta auriculares, todo entre las medias reses.
En ese momento, los imputados por el hecho fueron los dos ocupantes del camión: el chofer Néstor Roberto Lucero (37 años, oriundo de Las Higueras) y su compañero, Jorge Luis Rodríguez (35, oriundo de Río de los Sauces).
Luego la pesquisa avanzó en torno a posibles complicidades internas en el Servicio Penitenciario.
Un año después, la investigación alcanzó de lleno al propietario del frigorífico, Dagatti, y a su círculo más cercano.
Luis Mina, encargado de tareas administrativas en Livorno, era un asiduo colaborador de Dagatti también en el club Estudiantes. En tanto, el cuarto detenido, Maximiliano Irusta, sería empleado del transportista de apellido Bravo.
En el club Estudiantes, en pleno inicio de la pretemporada de fútbol, todo es incertidumbre. La segunda autoridad en la entidad es otro hijo de Alicio Dagatti, Federico.
No ha trascendido quiénes son los letrados que defienden al empresario.
Su hermana es abogada, pero tampoco ha efectuado declaraciones a la prensa. El hermetismo que rodea el caso viene alimentando todo tipo de especulaciones y rumores en “el Imperio del Sur”.