El juez de Control y Faltas 7 de Córdoba, Milton Peralta, volvió a ordenar la libertad del empresario frigorífico y presidente del Club Estudiantes de Río Cuarto Alicio Dagatti, imputado por asociación ilícita y otros delitos.
Dagatti fue detenido el 4 de diciembre del 2024 junto a su hijo, Ignacio, y el director del frigorífico Livorno, Luis Mina.
Los tres fueron acusados de liderar una presunta asociación ilícita dedicada a la introducción de celulares, droga y otros elementos prohibidos en establecimientos penitenciarios de la provincia de Córdoba.
La investigación principal está a cargo del fiscal de Delitos Complejos Nº 1 de Córdoba, Enrique Gavier, quien vincula el ingreso de celulares entre las medias reses del frigorífico Livorno con delitos cometidos desde la cárcel, los llamados “call center tumberos”.
Gavier se opone a liberar a Dagatti.
El principal testimonio que involucró a Alicio Dagatti es el del chofer del llamado “camión narco” interceptado en Bouwer en diciembre del 2023. En momentos en que lo juzgaban por haber ingresado droga a la cárcel y luego de que fuera condenado Lucero sostuvo que Dagatti era quien le pagaba o lo presionaba para que hiciera ese “trabajo”.
El 17 de junio pasado, el juez Milton Peralta declaró nulo el testimonio de Lucero ( de los días 5 y 9 de diciembre, en la causa Gavier). Consideró que fue tomado “irregularmente”, que se habría autoincriminado y debería haber sido asistido por un abogado.
Con todo, Peralta dispuso la libertad de Dagatti. Pero le fijó una fianza de 900 mil dólares.
Mientras la familia de Dagatti hacía el trámite de constituir la fianza (ofrecen bienes como garantía de que no se va a fugar), el fiscal Gavier dictó una nueva orden de detención contra el empresario. Lo acusó de comercialización de carne en mal estado y ordenó su detención.
Señaló que con su hijo y otros habrían organizado el reingreso a Bouwer de las medias reses que iban en el llamado “camión narco”. También Gavier tuvo en cuenta dos denuncias por presuntos casos de triquinosis y gusanos en la carne vendida por frigoríficos de la familia Dagatti en el sur provincial.
Pereyra declaró nula la nueva detención ordenada por Gavier e insistió con que ya fue evaluado que no existe riesgo procesal. Volvió a ordenar la libertad de Alicio Dagatti.

Apelación y contrapunto
A todo esto, Gavier apeló el primer fallo de Peralta que libera a Dagatti y al acompañante del chofer del camión Maximiliano Irusta (este último con una fianza de 30 mil dólares).
Para el fiscal de Delitos Complejos, el juez Peralta “realiza un análisis fragmentario de la aprueba ignorando los riesgos procesales: peligro de fuga y entorpecimiento de la investigación” que a su juicio justificarían la prisión preventiva.
Entre otros argumentos, Gavier alude a pruebas de una “red de contactos” que tendría Dagatti en diversos ámbitos: político, comercial, mediático, “para obtener beneficios irregulares, como la designación de una sobrina como Procuradora Fiscal o la obtención de habilitaciones municipales”.
Gavier señala que “Alicio Dagatti tiene una configuración de mensajes efímeros en Whatsapp” y lo interpreta como “un acto deliberado de entorpecimiento”. Señala que los mensajes clave para la investigación se obtuvieron del celular de su hijo. Considera que el empresario habría manipulado información en medios locales y que “su poder económico y recursos (como un avión) facilitarían su clandestinidad”.
Asimismo, Gavier rechaza la nulidad del testimonio de Lucero.
Sostiene que el chofer no era imputado sino víctima de amenazas de muerte supuestamente proferidas por Dagatti. Pide que se deje sin efecto la nulidad de sus declaraciones y, admite que “son pruebas esenciales para acreditar la existencia de la banda criminal y la responsabilidad de los imputados”.

Por su parte el defensor de Dagatti, Matías Pueyrredón, confirmó que Peralta volvió a ordenar la libertad del empresario “en duros términos para el fiscal y el proceso”.
Versiones dan cuenta de cierto malestar en el Juzgado de Control, porque cuando el juez Peralta acababa de dictaminar que no había riesgo procesal y de ordenar la libertad, el fiscal Gavier “sacó de la galera otra imputación” y una orden de detención, por otro delito.
En la resolución de Peralta se pide la nulidad del decreto del fiscal Gavier que dispone la detención. Pero además se decide “poner en conocimiento de la situación al Tribunal Superior de Justicia de la Provincia de Córdoba”.
A todo esto a Dagatti le queda otra causa en la que tenía orden de detención, la que corresponde a la droga ingresada en el camión narco. Pero esta también se caería si se confirma la nulidad de la declaración del chofer.
En la causa principal por asociación ilícita son nueve los imputados. Además de Alicio Dagatti y su hijo, Ignacio, el director del frigorífico Luis Mina; la abogada Virginia Collosa; un guardiacárcel, un veterinario, el acompañante del chofer y otros empleados de Livorno.