Alicio Osvaldo Dagatti (60), empresario frigorífico y dirigente deportivo de Río Cuarto, pasó ocho meses detenido en Córdoba. Recuperó la libertad este 8 de agosto, aunque sigue acusado como presunto jefe de asociación ilícita, por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización y de tráfico de alimentos peligrosos para la salud.
Todo comenzó cuando, el 26 de diciembre de 2023, en el establecimiento penitenciario de Bouwer se interceptó un camión del frigorífico Livorno (que pertenece a Alicio Ignacio Dagatti, su hijo), en el que, entre las medias reses, se hallaron siete teléfonos celulares (presuntamente destinados a presos); 1,7 kilos de marihuana; 10 gramos de cocaína, dos blíster de pastillas, y botellas de alcohol.
Enseguida, la fiscalía especializada en narcotráfico investigó al chofer Néstor Lucero y a su acompañante por presunta tenencia de estupefacientes con fines de comercialización agravada. El 11 de noviembre, cuando le estaban haciendo el juicio, Lucero presentó una nota que pidió que quedara guardada en la secretaría de la Cámara en lo Criminal y Correccional de octava nominación. El 19 de ese mes fue condenado a cinco años de prisión.
Aquella nota de Lucero es la principal prueba contra Dagatti. Allí, Lucero dio la supuesta identidad de la persona que le suministró “la bolsa con droga y celulares”.
“Se trata del dueño del frigorífico Livorno, en el cual cargamos las medias reses de carne vacuna con destino a la cárcel de Bouwer, de nombre Alisio (sic) Dagatti”, expresa el documento.
La misiva que presentó Lucero, entonces acompañado por su defensora, también dice: “Con respecto al destino de la sustancia estupefaciente y celulares al interior de la cárcel de Bouwer, era para el sector cocina en donde un guardiacárcel, de apellido Farías, era el que estaba al tanto de la recepción y permitía los ingresos relajando la custodia y registro del camión”.
Y agrega la carta: “Pongo de manifiesto que fui amenazado con matarme a mí y a mi familia si brindaba información”.
La Cámara del Crimen puso en conocimiento del Ministerio Público Fiscal esta acusación y días después el fiscal de Delitos Complejos de Córdoba, Enrique Gavier, ordenó detener a Alicio Dagatti padre, a su hijo Ignacio, al director del frigorífico Luis Mina, como líderes de una asociación ilícita.
Luego sumó la imputación del guardiacárcel Ramón Farías y otras cinco personas vinculadas al frigorífico. Posteriormente, también los acusó por supuesta venta de carne en mal estado al penal.
Gavier volvió a tomar declaración al chofer condenado, pero esa testimonial fue considerada nula por el juez de Control Milton Peralta, quien en tres oportunidades ordenó liberar a Dagatti.
Existe una fuerte controversia entre Gavier y Peralta sobre la prisión preventiva en la causa de asociación ilícita. Sin embargo, en el expediente por drogas, la fiscal Paulina Lingua ordenó su liberación el 8 de agosto. A la fianza de U$S 900 mil fijada por Peralta, la defensa ofreció sumar bienes por otros 500 mil.
Un mensaje de agradecimiento de Dagatti
A horas de regresar a Río Cuarto, el empresario agradeció por redes sociales a quienes lo alentaron y apoyaron.
“Su cercanía y buena predisposición para colaborar, ofrecer una mano amiga o simplemente brindarme palabras de aliento a través de mis seres queridos, han sido fundamentales para mantener viva mi esperanza, la fuerza en mi alma y sobre todo mi mente”, expresó.

Destacó que, junto con sus abogados y asesores, “desde el primer día” se puso “a disposición de la Justicia con absoluta disciplina, con el compromiso de colaborar y facilitar todo lo que sea necesario para esclarecer los hechos de público conocimiento”.
“Siempre he accionado en plena línea con la ley y con la convicción de que todo el proceso de la justicia debe ser transparente, con el objetivo de llegar a la verdad, y allí siempre me encontrarán; en concordancia con mi palabra y mi forma de obrar en la vida”, agregó Dagatti.
La discusión entre fiscales y jueces
Mientras Gavier insiste en que la libertad de Dagatti, por sus recursos, sus contactos y otros indicios, representa un riesgo procesal, la fiscal que lo investiga por drogas, Paulina Lingua, detalló su criterio diametralmente opuesto y coincidente con el del juez Peralta.
“Si bien se advierten algunos indicios e indicadores serios y concretos de riesgo procesal que inciden de manera negativa, hay otros aspectos que lo hacen de manera positiva y permiten considerar –efectuando un análisis integral– que, en caso de recuperar su libertad, el imputado Alicio Osvaldo Dagatti se someterá a proceso y no evadirá el accionar de la Justicia”, expresa su resolución.
La fiscal admite que, por los delitos que se le imputan, Dagatti podría tener una pena de prisión efectiva, que tiene elevados medios económicos y personas conocidas tanto en la esfera gubernamental como de fuerzas de seguridad. Pero valora que el imputado “es una persona pública, altamente conocida no solo a nivel regional, donde tenía su centro de vida y negocios, sino también a nivel nacional”.
Señala que “su imagen ha trascendido los límites de la provincia de Córdoba, no solo por su función como presidente de un club de fútbol de renombre, sino también por sus aspiraciones políticas, habiendo sido publicada la imagen de su persona en diversos medios, no solo locales, sino también nacionales, lo cual le dificultaría permanecer oculto o llevar una vida en clandestinidad”.
Señala que Dagatti entregó su pasaporte y valora su arraigo. “Cuenta con varios grupos de relación que harían improbable que construya una nueva vida en la clandestinidad”, dice la fiscal.
Con todo, concluye que “no se avizora en esta instancia que el imputado pudiese entorpecer la investigación”. “A esta concurrencia de indicadores vino a sumarse el concreto ofrecimiento de una importante caución real realizado por la defensa del imputado (…) a los efectos de garantizar la sujeción del imputado al proceso”, agrega Lingua.