Tanto Héctor Jara (50) como Mauro Cardozo (22), quienes viajaban a bordo del camión Scania que fue interceptado el sábado por Gendarmería Nacional y que llevaba droga, declararon este martes ante el juez federal de San Francisco, Pablo Montesi.
El primero –oriundo de la localidad bonaerense de 9 de Julio- conducía el vehículo que transportaba maderas y, a la vez, llevaba oculto 156 kilos de cocaína en 147 ladrillos. El hombre reconoció su participación en el hecho al indicar que le ofrecieron llevar esa carga desde Orán, provincia de Salta, hasta provincia de Buenos Aires.
Cardozo, en tanto, negó su participación y, por medio de sus abogados, pidió la excarcelación. El joven tiene residencia en San Ramón de la Nueva Orán, Salta.
Según pudo saber La Voz de fuentes federales, ambos quedaron detenidos en la cárcel de San Francisco imputados por el delito de “transporte de estupefacientes”. Lo que se desconoce por el momento es si tienen antecedentes penales.
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La causa está en manos de la fiscal federal (subrogante) de San Francisco, María Marta Schianni.
La droga fue incautada en un control que llevó adelante el Escuadrón Seguridad Vial de Gendarmería Nacional sobre ruta provincial 1, a la altura de Morteros, en el kilómetro 13.
Los efectivos de la fuerza con asiento en San Francisco, detectaron algunas incoherencias de los ocupantes del camión y procedieron al control.
También se incautó dinero en efectivo (1.102.800 pesos), dispositivos móviles y documentación.
También se procedió a allanar un inmueble ubicado en la ciudad de Morteros, donde se secuestró un arma, cartuchos, y demás elementos de interés la causa. Además, se practicaron dos allanamientos en los respectivos domicilios de Jara y de Cardozo en donde se secuestraron una escopeta, teléfonos celulares y documentación que sería de utilidad para profundizar la investigación.
El recorrido de la droga
Lo que se trata de descifrar por estas horas es hacia dónde iba ese total de cocaína que transportaba el camión. Actualmente se están peritando celulares de los cuales podría surgir información relevante.
La cocaína se hallaba oculta debajo de las maderas en “ladrillos” que iban en cajas, algunas con nombres y apodos. Es por ello que una de las hipótesis es que en el largo recorrido podía haber habido algunas paradas técnicas donde se bajaba parte de esta carga.
