El martes 25 de julio de 2023 fue hallado a la vera de la avenida de Circunvalación el joven motociclista Nahuel Ezequiel Astrada, de 24 años, quien ya no tenía signos vitales cuando se acercaron a auxiliarlo.
La Honda Falcon tirada junto a él, con signos de haber sido embestida, daba muestras de una colisión con otro vehículo. Todo hacía suponer que el conductor del otro rodado se había dado a la fuga. Se hallaron en la calzada algunas piezas sueltas de un auto.
La ambulancia que llegó cuando Astrada ya había fallecido sirvió para que los profesionales de la salud constataran el deceso que luego la autopsia confirmó que se debió al traumatismo craneoencefálico.
Condenaron a 10 años de prisión al automovilista que persiguió y atropelló a un motociclista
Luego, la investigación a cargo del fiscal José Mana estableció que la moto de Astrada había sido sacada de la traza de la Circunvalación, embestida por un automóvil blanco.
El análisis de las cámaras de seguridad dio con las escenas de una persecución de un auto a la moto que, al ser alcanzada, terminó siendo embestida y junto a su conductor sacados del camino.
La colisión se produjo en la intersección de Circunvalación con avenida Valparaíso, tras una larga persecución por las calles del barrio Olmos Sur y otras vías de enlace.
Retrocediendo en el registro de las cámaras Mana se encontró con el inicio de la persecución en barrio Los Olmos Sur. Constituidos los comisionados policiales en el lugar dieron con la casa del conductor, César Alejandro Rodríguez Collino, entonces de 31 años.
A poco de andar, descubrieron guardado en un taller cercano el automóvil de la colisión, un Renault Logan blanco, con daños en su flanco izquierdo. En el costado del conductor el vehículo registraba daños muy significativos: guardabarros y paragolpes, cristal de la puerta y espejo retrovisor.
Todo coincidía y daba a entender de que se trataba de una colisión intencional.
Al ser detenido, Rodríguez Collino dijo que había sido víctima de un intento de robo por parte de un motochoro y que luego terminó en una colisión accidental.
De acuerdo al testimonio del letrado Pablo Pigini, Rodríguez “no tuvo intenciones de matar” y afirmó que el choque se dio porque el vehículo “hizo un trompo”.
Pigini dijo en su momento que su cliente ya había sido víctima de robos “cuatro veces en la puerta de su casa”.
Sin embargo, la fuga y la falta de indicios sobre el intento de robo, hicieron que Mana lo impute de homicidio simple, sin atenuantes.
En principio, se indicó que Rodríguez Collino creyó que el motociclista quería asaltarlo en una entradera. Pero, en realidad, la víctima pasaba por el lugar porque había ido de visita a un lugar muy cercano a visitar a un familiar, al que frecuentaba habitualmente.
Juicio y condena
La instrucción de Mana finalizó con la elevación a juicio que, en menos de un año llegó a debate oral en la Cámara 3ª del Crimen de la ciudad de Córdoba.
El vocal unipersonal Gustavo Ispani condenó a Rodríguez Collino como “autor penalmente responsable del delito de homicidio simple”, por lo que le impuso una pena de 10 años de prisión e inhabilitación especial para conducir vehículos por cinco años.
Además, se decomisó, a favor del Estado provincial, el automóvil Renault Logan blanco, dominio AE385UH por ser “instrumento del delito”, sin perjuicio del derecho de terceros, es decir, que puede estar sujeto al reclamo de los familiares de la víctima.
En el juicio actuó como querellante el abogado Juan Pablo Rubio, asistiendo a la pareja de Astrada, en representación de su hija menor.
Actuó como acusador el fiscal de Cámara Marcelo Hidalgo, quien solicitó la pena de prisión por homicidio simple con dolo directo, con intención de matar. Criticó al acusado porque actuó como justiciero y le aplicó “Justicia fast food” a su víctima.
Si bien no se conocen los fundamentos de la sentencia, de fuentes judiciales La Voz pudo conocer que el homicidio simple fue sancionado con dolo directo, con intención de matar.
La defensa de Rodríguez Collino -a cargo de Pigini y María Macarena Martin Ubiergo- había solicitado que se encuadrara el hecho como un homicidio culposo, pero esa figura penal no prosperó.
