Una brigada de la División Homicidios de la Policía provincial trabaja para echar luz sobre el caso de un joven que fue asesinado de al menos un balazo en la espalda en la ciudad de Córdoba. La víctima se llamaba Abel Cortez y tenía 26 años. Vivía en barrio San Roque.
Por el momento no hay detenidos ni imputados.
Una de las hipótesis que cobraba fuerza en la noche del martes es que el joven habría integrado una banda que habría intentado asaltar a un policía que volvía de trabajar.
Este efectivo se habría resistido al asalto y habría hecho disparos.
Así las cosas, los ladrones habrían dejado abandonado a su suerte a su presunto cómplice. “Lo dejaron en su casa, tirado, abandonado”, comentó un informante que pidió reserva.
Pero claro, todo está en el marco de las sospechas. Todo es objeto de análisis e investigación. Todo se circunscribe a estos preocupantes tiempos violentos que se desarrollan sin freno en Córdoba.
De hecho, el fin de semana largo tuvo graves episodios de inseguridad.
Disparo, muerte y pesquisa
Todo se conoció pasado el mediodía del martes cuando el muchacho llegó muy malherido al Hospital de Pronta Atención Madre Teresa de Calcuta de barrio Villa Adela.
El muchacho fue llevado por su madre. El herido ya no hablaba. Presentaba un balazo en la espalda. Desesperada, su progenitora comenzó a clamar por ayuda pero no supo brindar más datos.
Personal médico del centro de salud intentó salvar al muchacho, pero no fue posible. Finalmente, falleció.
La madre del joven, en un ataque de llantos, no supo decir en un primer momento qué había sucedido.
Momentos más tarde, investigadores lograron que la mujer les relatara que unos hombres habían bajado a su hijo de un auto ya moribundo. Acto seguido, lo habían dejado librado a su suerte frente a su casa de calle Camilo Isleño de barrio San Roque. Fue así que su madre lo trasladó al centro de salud, donde murió.
Fuentes policiales indicaron que el fallecido tenía antecedentes policiales.
Confirmada la muerte violenta, se pasó al trabajo investigativo a pleno.
Los pesquisas pudieron apuntalar el hecho de que el joven había sido abandonado a su suerte por un grupo de conocidos. En paralelo, tras cotejar llamados al 911, se pudo establecer que en inmediaciones de esa zona un efectivo policial había sido asaltado cuando volvía a su casa por una banda.
Al parecer iba en moto.
En esas circunstancias, ese efectivo habría sacado un arma y se habría enfrentado con los sujetos.
Ese caso nada tiene que ver con otro policía (en tareas no operativas y sin arma) que resultó herido al ser asaltado por motochoros en barrio Cerveceros.
Volviendo al caso de barrio San Roque, la causa está en manos de la fiscal Lourdes Quagliatti.
La pesquisa cobraba impulso en la noche del martes.
De todos modos, no se descartaba que el joven hubiera sido baleado en el marco de otra venganza por causas no aclaradas.
Más heridos en las calles
Por otro lado, en distintos hechos ocurridos en las últimas horas en la ciudad de Córdoba, otros dos hombres fueron heridos a balazos por agresores que escaparon y que, por ahora, no han sido detenidos por la Policía.
Por un lado, un hombre de 32 años fue herido a balazos en el abdomen y en sus manos en cercanías del canal maestro de barrio Las Violetas. Su esposa lo llevó hasta el Hospital Eva Perón, donde quedó internado. El damnificado, Gabriel Pizarro (32), dijo que los agresores escaparon en una moto de baja cilindrada, indicaron fuentes oficiales.
Por otro lado, un hombre de 40 años fue herido de un balazo en una rodilla por varios individuos que lo atacaron en barrio Ampliación Cabildo, en la zona sur de la ciudad de Córdoba.
Según la víctima, Wilson Lencina (40), todo sucedió en la madrugada del lunes mientras se encontraba frente a un domicilio y aparecieron cuatro jóvenes, quienes lo atacaron presuntamente sin decir palabra.
El hombre fue trasladado hasta el Hospital Príncipe de Asturias, donde quedó internado, añadieron las fuentes. El caso se investiga.
