Un hecho de inseguridad conmocionó a la ciudad de Córdoba esta semana: dos delincuentes usaron a una niña para robar ropa en un local de barrio San Vicente.
El hecho, según informó El Doce, ocurrió este miércoles por la tarde, en un local ubicado en Sargento Cabral, entre San Jerónimo y Entre Ríos.
El registro de las cámaras de seguridad del negocio mostró todos los movimientos de los ladrones. Según se puede ver, la menor de edad, que tendría cerca de 12 años, respondía a las órdenes de los adultos.
Para llevar adelante el robo, el adulto, que vestía una camiseta de la Selección Argentina, salió del probador con un buzo en la mano. Tras esto, fue a hablar con la empleada para distraerla, mientras la niña se dirigió hacia la vidriera, se arrodilló, y sacó una prenda que tiró a la vereda. Afuera del local esperaba un cómplice, otro adulto.
Instantes después, la niña se acercó al mostrador y, con gran velocidad, se guardó una billetera también estaba a la venta en el bolsillo de su campera. En todo este tiempo el primer malhechor seguía simulando su interés por la prenda junto a la empleada.
Sin embargo, el robo no terminó ahí: minutos después, el cómplice que estaba en la calle entró al local y le ordenó a la pequeña que saque un pantalón y lo guarde en una bolsa. Acto seguido, se retiró del establecimiento.
Inseguridad en Córdoba: la bronca y el dolor del dueño del local asaltado
En diálogo con el mismo medio, el dueño del local expresó su dolor e indignación tras el hecho de inseguridad: le robaron cerca de siete jeans, joggings y una billetera que estaba a la venta. “La menor con una cancha como de un grande fue la que más sacó conjuntamente con el más grande de la bolsa, mientras el otro distraía a la empleada”, relató.
Hasta donde sabe el comerciante, los ladrones llegaron en un auto que dejaron estacionado a 20 metros. “Van hacia el auto, sacaban las prendas que tenían en la bolsa y las metían en el asiento de atrás”, profundizó.
En tanto, un cliente que fue testigo del repudiable hecho le avisó a la Guardia Urbana Municipal y a la Policía. No obstante, se desconoce si alcanzaron a detenerlos y qué pasó con la mercadería.
Sobre este punto, el dueño del comercio apuntó que los oficiales que se acercaron al negocio le “sugirieron” a la empleada que no hiciera la denuncia porque “no iba a recuperar las cosas”.
