Imputados por supuestas vejaciones y daños se encuentran detenidos dos suboficiales de la Policía de Córdoba a raíz de un violento operativo con una motociclista en la localidad de Villa Nueva, próxima a la ciudad de Villa María. La víctima es una mujer que está embarazada de dos meses, según señalaron fuentes con acceso a la causa.
Según trascendió, fue otra policía la que, al ver la forma en que estaba siendo detenida la motociclista, dio aviso de todo a sus superiores.
La causa judicial es llevada adelante por la fiscal Juliana Companys.
El episodio se ha convertido en el primer escándalo de magnitud en ámbitos policiales en este 2023. A la par de la detención, ambos policías quedaron en situación pasiva por seis meses debido al sumario abierto por el Órgano de Control Disciplinario (el nuevo Tribunal de Conducta Policial).
El caso se inició el pasado domingo cuando una patrulla policial quiso controlar a una motocicleta que aparentemente circulaba por las calles de Villa Nueva sin luces y a una importante velocidad, según voceros de la fuerza.
Así las cosas, los policías detuvieron la moto que era conducida por una mujer de 25 años. “La motociclista no contaba con los papeles del rodado y se dispuso el secuestro del vehículo. Fue así que la mujer se ofuscó por la situación y los policías la terminaron deteniendo y trasladando a una dependencia por resistencia a la autoridad. Fue violento, desmedido. Nada justifica lo que pasó”, confió una fuente de la fuerza. “Como la mujer era detenida, se pidió llamar a una mujer policía como señala el procedimiento. Esa policía fue clave”, añadió la fuente, quien remarcó que hubo un “uso desmedido de la fuerza en el accionar de esos funcionarios”.
Ya en el control médico de rigor, se determinó que la motociclista tenía un embarazo de 2 meses. Afortunadamente, no hay riesgos de salud para el bebé ni de la mujer, se indicó.
Denuncia y causa abierta
Según trascendió, la mujer policía que fue convocada al procedimiento de detención terminó denunciando a sus compañeros por la forma violenta con que habían demorado a la motociclista.
La causa quedó radicada en la unidad judicial y se dio parte a la fiscalía de turno correspondiente.
Así fue que la fiscal Juliana Companys se enteró de todo y dispuso una serie de medidas procesales, como la toma de testimonios. Sobre todo, de la motociclista víctima del violento procedimiento.
El pasado lunes, por orden fiscal, se detuvo a los dos suboficiales que participaron de la aprehensión de la motociclista en Villa Nueva. Se trata del sargento ayudante Nicolás Luis Melida (37) y del sargento primero Jorge Luis Espinosa (47), ambos dependientes de la comisaría de aquella población.
Los efectivos quedaron imputados por supuestas vejaciones.
A Melida, en tanto, se la añadió la acusación por daños.
Fueron alojados en una dependencia oficial y serán indagados en las próximas horas por la funcionaria judicial, quien les secuestró los celulares y el armamento.
No es la primera vez que un operativo callejero de uniformados con un motociclista termina en un hecho de violencia con lesionados y daños.
A raíz de la imputación, en paralelo y a nivel administrativo, los dos policías quedaron en situación pasiva.
Cabe señalar que un total de 81 efectivos de la Policía terminaron con serias sanciones disciplinarias en 2022, por haber cometido delitos y faltas administrativas. De ese total, la mayoría terminó suspendida de sus funciones. El resto, fue cesanteado y destituido: es decir, fue echado.
En paralelo, 2022 terminó con 244 uniformados, en su gran mayoría policías, apartados de su trabajo por investigaciones abiertas por mal desempeño. Es decir, quedaron bajo la lupa y, por ahora, siguen sin estar en funciones en 2023.
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