Un pasajero que llegaba al aeropuerto de Córdoba desde Chile fue detectado por personal de Aduana con una valija con exceso de peso. Se la abrió y se descubrió que un cargamento de objetos de lujo sin declarar, entre los que se encontraban relojes de alta gama, teléfonos celulares y otros aparatos electrónicos. En total, todo lo secuestrado tenía un valor en el mercado de 92,5 millones de pesos.
El hecho ocurrió el pasado miércoles en el aeropuerto internacional Ambrosio Taravella, donde el hombre quería pasar su equipaje repleto de elementos de contrabando para revenderlos en el país.
A los agentes aduaneros les llamó la atención el marcado sobrepeso que había en la valija, por lo que personal de la Sección Aeropuerto de la Dirección General de Aduanas (DGA) le solicitó al pasajero que la abriera para verificar su contenido en un control del salón de arribos.
El saldo del procedimiento a cargo de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) fue revelador. Se verificó que el hombre -argentino, de iniciales D.A.- quería ingresar al país sin declarar 15 relojes de alta gama de marcas de lujo como Rolex, Cartier y Armani, 9 teléfonos celulares smartphones Samsung, Xiaomi y Apple; 7 relojes inteligentes, dos tablets Lenovo y Microsoft, dos teclados de esa misma marca, dos cajas de airpods -auriculares para Iphone- y hasta una parva de joyas por un peso de 53 gramos.
Todos estos elementos, de un valor total en el mercado de 92.590.000 pesos, fueron secuestrados por personal de Seguridad y se le tramitó la denuncia correspondiente al infractor por violar el Régimen de Equipaje. Con la sospecha de ser material para reventa, se lo investiga por contrabando.
Córdoba, en la ruta del contrabando
También en Córdoba, a finales de noviembre se detectó un micro proveniente de Orán, en Salta, que traía mercadería de origen extranjero sin el aval legal. El control se hizo en el kilómetro 130 de la ruta 17, en inmediaciones de la localidad de Obispo Trejo.
Allí, se detectaron 63 licuadoras, 24 termos y 6 vasos térmicos, 3 celulares, 6 hornos eléctricos, 48 parlantes, 59 pavas eléctricas, 3 balanzas eléctricas, 4 jugueras, 3 ventiladores, 6 máquinas de afeitar, 6 planchitas de cabello y 4 cubiertas, todo sin el permiso legal. Se labraron actuaciones por infracción a la ley 22.415 del Código Aduanero y todos los elementos fueron secuestrados.
En la continuidad de estos controles realizados en la terminales aeroportuarias por parte de la Dirección General de Aduanas, en Ezeiza detectaron productos falsificados de primeras marcas por un valor superior a los 600 millones de pesos.
Este cargamento que ingresaba al país como importación había sido elegido al azar por las autoridades y al revisarlo hallaron un lote lleno de productos truchos de importantes marcas internacionales.
Se secuestraron 1.100 relojes, 70 pares de zapatillas, 50 bolsos, 400 fundas de celulares y un centenar de piezas de bijouterie. Se estima que el precio total de lo incautado ronda los 600 millones de pesos.
Antes de descubrir estos elementos de contrabando, Aduana había hecho un megaoperativo en la Terminal Portuaria 4, de Retiro, con 22 contenedores que transportaban motores de avión y auto, neumáticos, computadoras, baterías, cargadores de celulares, grupos electrógenos y armas de aire comprimido.