La familia de Sebastián Villarreal, el vecino fue que asesinado por motochoros el pasado febrero en barrio Yofre Norte de Córdoba Capital, convocó a una protesta callejera este jueves frente a Tribunales I. La protesta fue decidida para reclamar el total esclarecimiento del asesinato, al entender que hubo mayores de edad involucrados en este caso.
Por el crimen de este vecino, ejecutado a balazos cuando se iba a trabajar, fueron detenidos cuatro jóvenes. Dos de ellos tienen 14 y 17 años, mientras que los restantes cuentan con 19 y 20 años. Para los investigadores, los menores eran quienes iban en la motocicleta y atacaron a Sebastián. Por su edad, el de 14 es completamente inimputable.
Trascendió que tres de los sospechosos contaban con serios antecedentes penales por delitos contra la propiedad, como robos.
La causa está en manos del fiscal Andrés Godoy (actualmente de licencia por motivos personales). Se espera que de un momento a otro se definan e informen públicamente las imputaciones para los acusados. Todo indica que las imputaciones serían por homicidio en ocasión de robo y robo calificado.
Para los pesquisas, los cuatro jóvenes integraban una pandilla de motochoros que había aprendido a realizar y ejecutar violentos asaltos armados. En ese tren de sospechas, los jóvenes intercambiaban motos, prendas y armas para no ser descubiertos.
La causa lejos está de haber quedado cerrada. Los pesquisas de la División Robos y Hurtos de la Policía continúan con la investigación y no se descartan más detenciones.
Sebastián Villarreal, padre de familia, fue atacado de madrugada y en moto.
Sucedió el 29 de febrero pasado, cuando se iba a trabajar a una fábrica de plásticos.
A poco de salir de su casa a bordo de su moto, en Yofre Norte, fue abordado por dos motochoros que llevaban cascos y portaban al menos una pistola automática. En esas circunstancias, fue ejecutado a balazos. “¡No me matés!”, alcanzó a gritar la víctima. Le dispararon y se llevaron su moto.
Los pesquisas ubican a los dos menores, el de 17 y el de 14 años, en la escena: serían quienes iban en la moto y cometieron el asesinato. Pero detrás de ellos están los demás. Actuaban, dicen los investigadores, como una banda.
La investigación, como ya se indicó en La Voz, se basó en un prolijo y puntilloso trabajo de análisis de filmaciones de cámaras de seguridad, además de la toma de testimonios y búsqueda de testigos, entre otras medidas.
Peligrosa banda de motochoros
Según fuentes de la investigación, los ahora acusados integraban una peligrosa banda de jóvenes motochoros que habían aprendido a actuar con violencia y con roles bien asignados a la hora de atacar. El de 20 años presuntamente llevaba la “voz cantante” y repartía responsabilidades a la hora de los asaltos callejeros.
Según fuentes del caso, habían aprendido sobre horarios de movimientos de potenciales víctimas y de patrullajes. Sabían de cámaras y sus ubicaciones.
Para cometer sus delitos, apelaban a maniobras distractivas y a un aceitado procedimiento de vigilancia de las zonas.
Voceros del caso señalaron que al menos tres de los acusados habían participado en numerosos hechos. Vivían en Ciudad Evita y en la villa Capullo de Mi Esperanza. El de 14 fue atrapado en Villa Carlos Paz.
Protesta de la familia frente a Tribunales I
A todo esto, la familia de Sebastián, que es parte querellante en la causa, reclama e insiste que en la causa hubo mayores involucrados.
“Que investiguen a fondo y lleven a la verdad total. No puede ser que digan que fueron menores solamente. De haber sido ellos, acá alguien los mandó a hacerlo. Acá hay mayores involucrados. Que se llegue a todos”, reclaman desde el seno de la familia de la víctima.
Familiares, amigos y allegados de la víctima convocaron a una nueva protesta callejera en Córdoba.
Será este jueves a las 12 frente a Tribunales I, de Córdoba, donde funcionan el Tribunal Superior de Justicia y la Fiscalía General de la Provincia. Allí, entre otras cosas, pedirán justicia por el crimen.
A través de un video difundido en redes sociales, los familiares hablaron sobre “crueldad” de parte de la Justicia. Reprocharon haberse enterado de las detenciones por la prensa y no por los canales correspondientes.
