El alevoso asesinato de Sebastián Villarreal, el vecino ultimado a tiros durante un asalto cometido por motochoros en Córdoba Capital en 2024, será juzgado en un juicio común y con jurados populares y no en un proceso abreviado. Las audiencias se realizarían recién en 2026.
Al banquillo llegarán tres jóvenes mayores de edad sindicados de haber integrado la patota que mató a Sebastián. Serán juzgados por homicidio en ocasión de robo.
Todo esto se definió en las últimas horas en la Cámara 3ª del Crimen.
Sucede que, días atrás y en los preparativos por el juicio, el fiscal de Cámara Fernando López Villagra había ofrecido a los acusados la posibilidad de un juicio abreviado.
En ese marco, el acusador había ofrecido, en una audiencia pública en Tribunales II, un acuerdo legal y penas de entre 10 y 16 años a las defensas de los acusados. Desde la fiscalía se remarcó que eran penas altas.
Para que hubiera juicio abreviado, los acusados debían confesar todo, pedir disculpas y mostrar un arrepentimiento por lo hecho.
Este pedido fue duramente cuestionado por la familia de la víctima, quien viene reclamando la realización de un juicio común.
Sucede que los querellantes, por la ley procesal, tienen voz pero no voto. Entonces, la postura, aunque esté en desacuerdo, no es vinculante.
Tras analizar los ofrecimientos de la fiscalía, una de las defensas no aceptó al pedido fiscal por considerar que la pena era alta.
“Al no haber aceptación de uno de los acusados, finalmente la Cámara 3ª del Crimen decidió la realización de un juicio común. No habrá un proceso abreviado. Y eso nos genera satisfacción porque era lo que la familia de Sebastián reclamaba”, le dijo a La Voz la abogada Graciela Taranto quien, con su par, Daniela Barreiro, representa a los Villarreal.
Juicio en 2026
Al ser un juicio con jurados populares, no será posible que las audiencias se realicen este año por una cuestión de agenda.
Todo indica que el juicio se resolverá finalmente en 2026.
Los acusados son Axel Fabricio Escada (20), Luciano Gonzalo Bustos (19) y Héctor Alejandro Herrera (25), todos actualmente detenidos en la cárcel de Bouwer.
La parte querellante ya adelantó que pedirá que los tres sean condenados por homicidio criminis causae, que era la acusación inicial en la fiscalía de instrucción y que luego fue rebajada por un juez de Control.
En caso de haber condena por criminis causae (cuando se mata para buscar la impunidad), la pena es la prisión perpetua.
Cabe señalar que hay dos acusados más: uno que era menor al momento de los hechos y que, días atrás, fue declarado penalmente responsable y fue enviado al Complejo Esperanza. En un año, la jueza de Menores deberá resolver qué pena le aplica (si es que finalmente le aplica).
A su vez, hay otro adolescente que tenía 14 años cuando sucedió todo y que es inimputable. Ese menor, como ya tiene 16, se encuentra en Complejo Esperanza porque cometió un violento asalto hace pocos meses.

Un crimen conmocionante
El crimen de Sebastián Villarreal sacudió a Córdoba en febrero de 2024.
El hombre de 36 años fue abordado en horas de la madrugada, en barrio Yofre Norte de la Capital, cuando se iba a trabajar en su moto.
Fue rodeado por varios delincuentes en motocicletas. En medio del asalto, recibió varios disparos y murió en el acto.
Los ladrones le sustrajeron la motocicleta y escaparon.
Una compleja investigación del fiscal de instrucción Andrés Godoy permitió identificar a los supuestos responsables de haber integrado el grupo de motochoros. Se detuvo a mayores y a menores.
De acuerdo a la pesquisa, la banda se dedicaba a asaltar a motociclistas para robarles con violencia. Había intercambios de motos, armas y cascos. Funcionaban como un grupo más que organizado.
10 acusados en total al banquillo
Cabe señalar que, además de los tres jóvenes que deberán responder por el crimen de Villarreal, habrá otros siete varones que serán juzgados por otros numerosos robos cometidos por la patota de motochoros en la misma zona.