El suspendido juez del Tribunal de Casación bonaerense Manuel Ordoqui fue detenido este lunes tras ser destituido de su cargo por un jurado de enjuiciamiento y quedar acusado de integrar una asociación ilícita. La organización presuntamente está liderada por el exmagistrado de Garantías de La Plata, César Melazo, y se dedicaba a cometer robos, liberar zonas y encubrir delitos junto a policías, barrabravas y funcionarios judiciales.
Fuentes de la justicia informaron que Ordoqui fue apresado esta tarde en un domicilio ubicado en calles 481, entre 29 y 30, de la localidad platense de Gonnet por pedido de la fiscal de Instrucción Betina Lacki, quien, en principio, lo indagará mañana por los delitos de “cohecho pasivo, ocho casos de tráfico de influencias y asociación ilícita”.
Ordoqui, quien estaba suspendido de su cargo y tenía su sueldo embargado en un 40 por ciento, se convirtió en el primer integrante del Tribunal de Casación Penal bonaerense en ser destituido por un jurado de enjuiciamiento presidido por la titular de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, Hilda Kogan.
El jury falló por unanimidad e hizo lugar a la acusación del Procurador General de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, en una audiencia en la que Ordoqui, quien integraba la Sala V de Casación, no estuvo presente.
Juez corrupto
Para el jurado, el ahora exjuez incurrió en incumplimiento de los deberes de funcionario público, graves irregularidades en los procedimientos a su cargo o donde hubiere intervenido, actos de parcialidad manifiesta y toda acción u omisión que implica la defección de la buena conducta que exige la constitución para el desempeño de su magistratura.
Según el jury, entre 2017 y 2018, en el marco de la tramitación de ciertos legajos casatorios, Ordoqui “actuó con parcialidad manifiesta en beneficio de un justiciable (Juan Ariel Heine). Al mismo tiempo, faltó al decoro y la dignidad de su función e incumplió los deberes inherentes a su cargo al brindar información interna y asesoramiento -al punto de redactar personalmente un escrito judicial a presentar en una causa sometida a su jurisdicción- a particulares (Lidia María Perna y el nombrado Heine)”.
“También recibió dádivas por estas gestiones y solicitó dinero para quien oficiara como secretaria privada, una vez descubiertas las ilegales maniobras”, señaló el fallo.
Otro caso atribuido a Ordoqui ocurrió en 2010, cuando la fiscal Lacki investigaba el homicidio de Juan Farías, quien formaba parte de una banda que había cometido delitos contra la propiedad y estaba integrada también por policías que liberaban zonas y que, al parecer, contaban con la protección del por entonces juez Melazo.
Por ese hecho, Lacki se contactó con un detenido por doble homicidio, Javier Ronco, quien le contó que entregaba dinero al fiscal Tomás Morán y que tenía “una punta” en Casación, quien resultó ser Ordoqui, quien en las escuchas era nombrado como “el tío” por haber mantenido en el pasado una relación sentimental con la tía biológica de dicho preso.
A su vez, esta mañana comenzó el juicio a Melazo y otros 14 imputados en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de La Plata.
Además del exjuez, Melazo, quien está con prisión preventiva, son sometidos a juicio el excomisario mayor Gustavo Bursztyn, el oficial Gustavo Andrés Gregorio Mena y el teniente primero Marcos Chiusaroli.
También están en el debate los imputados Ronco; Ángel Custodio “Pipi” Yalet; Adrián “Quichua” Manes; Carlos Bertoni; Carlos “Macha” Barroso Luna; Jorge “El fiscal” Gómez de Saravia; Héctor “Pepe” Vega; el exbarrabrava de Gimnasia Martín Ezequiel “Gaucho” Fernández; Enrique Edgardo “Quique” Petrullo; el exjefe de la barra de Estudiantes Rubén Orlando “El Tucumano” Herrera, y Claudia Edith Giunta.
Al momento de elevar la causa a juicio, Ordoqui era investigado como acusado de otorgar arrestos domiciliarios a cambio de dinero, pero no pudo ser procesado porque poseía fueros, mientras avanzaba el jury que culminó hoy con su destitución.
Según la investigación que tuvo a su cargo la fiscal Lacki, los procesados integran una asociación ilícita que cometía “robos bajo la modalidad de escruche, robo de autos, su posterior reducción; adulteración y venta, comercialización de estupefacientes, con un mismo modus operandi, con división y organización de tareas”.
Además, precisó que “algunos de ellos, en su condición de efectivos policiales, aseguraban la zona, entregaban los trabajos y brindaban cobertura policial” y el exjuez Melazo se presume brindaba protección a la banda.
Por su parte, Melazo renunció a su cargo en junio de 2017 cuando estaba apartado de sus funciones, de manera preventiva, por decisión del jury de enjuiciamiento abierto en su contra a partir de tres denuncias por mal desempeño y presuntas irregularidades en su juzgado.
En abril de 2019, la Cámara Penal de La Plata rechazó el pedido de prisión domiciliaria que presentó Melazo por considerar que no integra la población de riesgo por coronavirus para acceder a la detención domiciliaria por lo que continúa detenido en el Complejo Penitenciario I de Ezeiza.