Un grupo de ladrones ingresó a una vivienda, ubicada en pleno centro de Jesús María, durante la noche del viernes.
La propietaria, Virginia Gallardo, se enteró de que su casa había sido completamente desvalijada. Se llevaron todo pero el golpe fue mayor al percatarse que el todo incluyó hasta una urna que guardan las cenizas del padre de la damnificada.
Los ladrones forzaron una reja y entraron por la ventana, llevándose objetos de valor envueltos en sábanas, mochilas, bolsos y colchas.
La damnificada piensa que los ladrones, sin prestar atención a la cruz, no se habrían percatado que cargaban las cenizas de su padre. Al ser una caja pesada pensarían que contenía algo de valor.
Más noticias de Jesús María y Colonia Caroya
Desesperada por recuperar la urna, Virginia decidio hacer público su caso y se dirige directamente a los ladrones sin resentimientos y con un mensaje de esperanza: “Pido que me la devuelvan, que la dejen en un lugar público directo o en la misma casa donde saben que entraron. Apelo a la conciencia y empatía de los familiares y amigos de esta gente, esperando que alguien pueda darme información de donde está”, imploró.
La urna es una caja de plástico de color marrón oscuro, que resguarda con tornillos, las cenizas de su interior. Las mismas están envueltas en una bolsa hermética y en papel madera
