Un hombre de 70 años murió trágicamente en las últimas horas al no poder escapar del incendio que destruyó su vivienda en el barrio El Cerrito, en la zona noroeste de la ciudad de Córdoba. Su esposa, a todo esto, resultó con distintas lesiones y debió ser trasladada al Hospital Cura Brochero, donde quedó internada.
Si bien la causa del drama están bajo investigación, la presunción de los peritos es que el fuego se habría iniciado al tomar contacto una estufa halógena con una colcha o el colchón.
Con la tragedia de este abuelo, ya son dos las personas muertas por incendios en poco más de una semana: la anterior víctima había sido un bebé de 11 días.
La criatura falleció al quemarse su precria casa en barrio Ampliación Poeta Lugones. La sospecha es que aquel fuego se inició por una estufa que estaba prendida y que tomó contacto con elementos altamente combustibles.
Se trata del peor costado del frío y de la pobreza en Córdoba.
En relación a la última tragedia registrada, todo sucedió en la noche del pasado martes en un domicilio ubicado en calle Tomás Roatta al 3200 en barrio El Cerrito.
Las llamas, se sospecha, se iniciaron en la habitación donde descansaba el hombre. En segundos, el fuego se extendió por el resto de la casa.
Alertados por las llamas que se veían salir por la ventana, los vecinos de la cuadra corrieron a prestar ayuda, mientras algunos llamaban a la Policía que convocó a los bomberos.
Cuando la primera dotación de uniformados arribó, ya no quedaba por hacer por el hombre. Ya había fallecido en la cama. Las llamas habían sido apagadas por un vecino con un matafuego.
Al lado de la cama se encontró una estufa de tipo halógena que fue secuestrada y enviada a peritajes.
Una mujer de 81 años que reside en la casa fue trasladada al Hospital Cura Brochero ya que presentaba un cuadro de intoxicación por inhalación de monóxido de carbono del humo.
El caso del bebé
El pasado martes a la noche, un incendio devastó un departamento ubicado en la parte trasera de una vivienda en Ampliación Poeta Lugones. En la casa estaban un adolescente, un niño y un bebé. La madre había salido a calentar la mamadera.
En esas circunstancias se produjo un incendio que convirtió al departamento en una trampa mortal.
Los dos adolescentes pudieron escapar, pero el bebé no.
Si bien la pesquisa sigue abierta, la presunción es que el desastre se inició a causa de una estufa prendida precisamente por las bajas temperaturas.
