Un jubilado de 69 años fue encontrado sin vida en la madrugada de este sábado en Capilla del Monte, en un hecho que conmocionó a la localidad. El cuerpo fue hallado alrededor de las 01:30 en la intersección de las calles Urquiza y Mendoza, en pleno centro de la ciudad. Las autoridades detuvieron a una mujer de 57 años, quien según fuentes policiales indicaron que era la cuidadora y ahora principal sospechosa del crimen.
El hallazgo se produjo luego de que un testigo alertara a la policía tras observar el cuerpo en la calle. Al llegar al lugar, los efectivos encontraron marcas de arrastre que indicaban que la víctima podría haber sido trasladado desde el interior de una vivienda hacia la vía pública.
Fuentes judiciales indicaron a La Voz que la detenida tenía “un contrato de alquiler de un departamento”, que se ubica al fondo de la casa, siendo también que esta persona “aparentemente lo cuidaba”.
Al ingresar al domicilio de la vivienda, la policia encontró a la detenida, quien presentaba restos de sangre en su cuerpo. En el interior de la casa, se observaron manchas de sangre en el piso y en un pasillo, además de un hacha pequeña con rastros de sangre y fuentones con trapos ensangrentados. Todos estos elementos fueron secuestrados y se pusieron a disposición de la fiscalía como prueba del crimen.
La mujer fue aprehendida de inmediato y puesta a disposición de la Fiscalía de Cosquín, a cargo de Paula Kelm, quien ordenó su imputación por el delito de homicidio.
Una discusión y un ataque fatal
Según las primeras indagatorias, habría existido una discusión entre la sospechosa y la víctima, que habría derivado en un ataque fatal con un objeto contundente, más precisamente un hacha de mano, que en principio sería el arma homicida encontrada en el domicilio.
El ataque y posterior muerte del hombre de 69 años fue consecuencia de “múltiples golpes en la cabeza”.
Las pericias continúan en el lugar para determinar con exactitud las circunstancias del hecho. Mientras tanto, la detenida permanece bajo custodia policial a la espera de que se definan los cargos en su contra.
El cuerpo de fue encontrado en ropa interior en la vía pública, lo que sugiere y si bien todavía no está determinado, el hombre habría muerto en el interior dela vivienda y posteriormente fue la propia detenida quien lo arrastró a la calle, es la principal hipótesis que manejan desde la fiscalía.
Fue ahí el momento en que “los vecinos la vieron y llamaron a la policía”. Aunque todo es objeto de investigación.
Los vecinos del lugar manifestaron su sorpresa ante el hecho, ya que no habían escuchado ruidos inusuales durante la madrugada.
La Brigada de Investigaciones y la Policía Judicial trabajaron en conjunto para recabar evidencias en la escena del crimen. Además del hacha y los trapos ensangrentados, se encontraron otras herramientas que podrían estar relacionadas con el hecho.
El caso sigue abierto y las investigaciones avanzan para esclarecer los detalles del homicidio mientras que la fiscalía trabaja para reconstruir los hechos y determinar las responsabilidades correspondientes.