No pudo resistirse al impulso de ir a las fiestas, incluso con tobillera electrónica. La explotadora sexual Silvia Cristina Fecha (62) pidió a la Justicia federal de Córdoba la libertad condicional a pesar de haber violado de manera reiterada el beneficio de la prisión domiciliaria para asistir a celebraciones mientras debía cumplir las restricciones judiciales en su casa.
La mujer, nacida en Tucumán, fue condenada en 2020 en La Docta a ocho años de prisión como autora de trata de personas con fines de explotación sexual, agravada por haber sido perpetrada mediante engaño, amenazas, abuso de la situación de vulnerabilidad y por haber sido consumada la explotación. Fue sentenciada junto con Héctor Hugo Quiroga (este recibió ocho años y medio).
Explotadora sexual
En 2020, el Tribunal Oral Federal N° 1 de Córdoba (TOF1) probó que el 24 de febrero de 2015, mediante engaño, violencia y abuso de una situación de vulnerabilidad, Fecha captó y trasladó a la joven víctima desde la localidad de Las Talitas (Tucumán) hasta Río Tercero, con fines de explotación sexual.
Le hizo creer que iba a trabajar en casas de familia o vender estampitas (la víctima no trabajaba ni estudiaba en Tucumán y estaba inmersa en un conflicto familiar, además de consumir drogas).
Al arribar a Río Tercero, Quiroga acogió a la joven en su domicilio con engaños y violencia para explotarla sexualmente con múltiples “clientes”. Bajo amenazas y sin poder tener su DNI (se lo retuvieron), la víctima fue obligada a prostituirse a cambio de dinero, hasta aproximadamente mayo de 2015.
“Dicha explotación fue perpetrada mediante el aprovechamiento de la situación de vulnerabilidad de la joven”, indicó el juez Julián Faulcucci al condenar a Fecha y a Quiroga.
Salidas y “no” de la jueza
El defensor público solicitó la libertad condicional de Fecha, quien permaneció detenida desde el 4 de abril de 2018 en la cárcel, hasta que el 13 de noviembre de 2019 el TOF1 le otorgó la domiciliaria.
Sin embargo, el 9 de junio de 2020 el TOF1 le revocó el beneficio y ordenó su detención porque la detenida había abandonado el régimen al abandonar la casa sin autorización del tribunal y se había mudado a un domicilio que se encontraba cerca de la vivienda de la víctima del delito por el cual fue hallada culpable y condenada.
Poco más de dos años después, el 25 de octubre de 2022, el TOF1 le dio nuevamente la domiciliaria por su estado de salud, pero le colocó un dispositivo electrónico y le impuso la condición de que la vivienda estuviera alejada de donde habitaba la víctima.
No obstante, Fecha volvió a mostrar una actitud violatoria del régimen domiciliario, y el 26 de junio de este año el TOF1 le revocó el beneficio y la detuvo en el Complejo Carcelario Federal N° 3.
El tribunal descubrió que la mujer había nuevamente infringido las normas, ya que el Programa de Asistencia de Personas Bajo Vigilancia Electrónica, del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, detectó que el domingo 19 de marzo, entre las 13.19 y las 19.55, estuvo fuera de la casa sin informar de su salida.
Un día después, una persona –de forma anónima– alertó al TOF1 que Fecha había sido vista en una fiesta el 19 de marzo. Luego de 72 horas, Fecha llamó al tribunal para informar que ese domingo 19 había salido sin autorización al cumpleaños de su sobrina nieta, cerca de su domicilio.
Mencionó que había notificado de la salida al Patronato de Liberados de Tucumán, pero dijo que no solicitó autorización al tribunal porque sabía que se la iban a denegar.
Pero no fue la última salida. La Dirección de Asistencia de Personas Bajo Vigilancia Electrónica advirtió al tribunal que Fecha no sólo había abandonado la casa uno o dos días sino cinco, casi todos consecutivos: 26, 27, 28 y 31 de mayo y el 1 de junio, y sin autorización judicial. La defensa solo aportó un certificado médico, exclusivamente por la salida del 27 de mayo.
Como era previsible, fue nuevamente detenida y alojada desde el 5 de julio en la Unidad Penitenciaria N° 4 del Servicio Penitenciario de Tucumán. El defensor pidió que recibiera la libertad condicional, al considerar que le correspondía y porque, de acuerdo con el cómputo de pena, satisfacía el requisito temporal para acceder al beneficio (no es reincidente).
El fiscal auxiliar Augusto Richter dictaminó que si bien Fecha satisfacía el requisito temporal de libertad condicional, no se encontraban cumplidos los requisitos de ley. Recordó que frente a los reiterados incumplimientos de la mujer, el TOF1 había revocado la domiciliaria dos veces y señaló que los incumplimientos podían compararse con sanciones graves en la cárcel. Solicitó que antes de resolver, el tribunal consultara a la víctima.
La joven damnificada por la trata estuvo en desacuerdo con que Fecha recibiera la condicional y manifestó su temor.
La juez Carolina Prado, del TOF1, afirmó que si bien Fecha cumplía con el requisito temporal para obtener la condicional (es decir, el cumplimiento de los dos tercios de la condena), no fue declarada reincidente y no registró problemas de conducta en las prisiones, sí violó las condiciones impuestas del beneficio de la domiciliaria, incluso teniendo colocado el dispositivo electrónico.
“Lo expuesto da cuenta de que la interna Fecha, bajo un régimen de autodisciplina y autocontrol (prisión domiciliaria), no pudo dar cumplimiento con las normas de conducta esenciales que le fueron impuestas, esto es, la obligación de permanencia en el domicilio y la prohibición de salir injustificadamente de él”, indicó Prado.
“Siendo que los incumplimientos se produjeron hace poco tiempo (entre cinco y tres meses), fueron reiterados y numerosos, y que incluso tuvieron lugar tras la celebración de una audiencia en la que el Ministerio Público dejó solicitada la revocación de la prisión domiciliaria y en la que el tribunal le reiteró, de manera enfática, las condiciones por cumplir y las graves consecuencias de su infracción, es dable afirmar que la interna no ha alcanzado el grado de resocialización social favorable exigido para la concesión del régimen de libertad condicional, que importa la continuidad de normas de conducta a cumplir”, consideró.
“No puedo soslayar que la defensa adujo que Fecha no ha podido dimensionar la importancia de la obligación de avisar al tribunal sus salidas, por la estructura de su personalidad y la imposibilidad de continuar con su tratamiento psicológico”, agregó, y rechazó el pedido de condicional.
