Miembros del episcopado argentino, encargados del combate contra las drogas, tomaron postura ante el episodio trágico que aconteció en los últimos días: los asesinatos de Lara Gutiérrez (15), Morena Verdi (20) y Brenda del Castillo (20).
Al respecto, la Comisión Nacional de Pastoral de Adicciones y Drogadependencia rescató que el hecho “fue producto del avance del narcotráfico, especialmente en los barrios más vulnerables de nuestro país”.
Qué dijo la Iglesia sobre el triple crimen de Florencio Varela
La nota firmada por el cardenal Vicente Bokalic, monseñor Pedro Cannavóe y los presbíteros Cristian Viscardi y Leonardo Silio remarcó que la presencia de la Iglesia en barrios es esencial. “Acompañamos las vidas de niños y jóvenes y trabajamos para que la muerte y el dolor no se apropien de nuestros hermanos”, sostuvieron.

Además, demandaron la presencia del Estado. Consideran que su accionar debe ser a través de órganos de justicia y seguridad, brindando respuestas efectivas a las instituciones que trabajan en los barrios.
En el comunicado retomaron una declaración del Papa Francisco del 26 de junio de 2024:
—¡Cuántos traficantes de muerte hay —porque los traficantes de drogas son traficantes de muerte—, impulsados por la lógica del poder y del dinero a toda costa! Y esta plaga, que produce violencia y siembra sufrimiento y muerte, exige un acto de valentía por parte de toda la sociedad.