La Escuela N° 157 de Virrey de Pino, en La Matanza, vivió un tenso momento cuando un niño alertó a los docentes sobre la presencia de un arma en una mochila.
Se trató de un arma calibre 22 que el denunciante vio en la mochila de un compañero, de 10 años. Las autoridades del establecimiento educativo realizaron la denuncia a la Policía y aseguraron a los padres del estudiantado que ningun niño estuvo en peligro.
La policía que se hizo presente en el lugar constató que el arma no tenía municiones. Según verificaron fuentes locales, los oficiales se contactaron con la mamá del estudiante para informarle de la sitación y le pidieron que se trasladara a la comisaría de la zona para labrar el acta respectiva.
El fiscal Juan Pablo Insúa, de la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil Nº 2 de La Matanza, dispuso que el arma quedara incautado hasta determinar el origen y cómo llegó a manos del menor.
Por su parte, la madre del niño explicó que “el arma no andaba” y que llegó a manos del niño a través de una bandita de amigos de los hermanos del estudiante.
“Esa arma no sirve para nada. Echamos a esos chicos de casa y la pistola la tenía guardada en mis cosas y la tomó sin permiso. Pido mil disculpas a todas las personas que se sintieron afectadas por lo que pasó”, aseguró.