La Policía de Córdoba y el Ministerio Público Fiscal (MPF) ultiman detalles para poner en marcha un nuevo plan de seguridad urbana que, según las autoridades, marcará un antes y un después en la prevención y la respuesta frente al delito en la capital provincial.
El esquema, que se implementará de manera escalonada, prevé la creación de 24 distritos policiales y judiciales en la ciudad de Córdoba, con estructuras territoriales equivalentes y autoridades coordinadas entre sí.
“Este plan era algo que se venía demandando desde hace tiempo. La Policía no trabajaba de manera articulada con la Fiscalía. Ahora, el objetivo es que lo hagan de forma conjunta, en tiempo real”, explicó a La Voz el jefe de Seguridad Capital, Iván Rey, quien tendrá a su cargo la operatividad del nuevo modelo.
Y agregó: “Se crean 24 distritos policiales y la Justicia contará con todos los recursos de la Policía”.
Allí reside la piedra angular de este rediseño es la territorialización: cada nuevo distrito tendrá asignado un fiscal, un jefe policial (comisario inspector) y todo un equipo operativo de prevención e investigación.
El anuncio se da en el marco del acuerdo institucional alcanzado por el Poder Ejecutivo, el Tribunal Superior de Justicia, la Fiscalía General y el Ministerio Público Fiscal.
Cinco claves del plan
Rey habló sobre las cinco piezas fundamentales del nuevo diseño de seguridad sobre el cual estará a cargo de operativizar. Lo primero que remarcó es el rediseño territorial.
En Capital, se pasa de 13 a 25 distritos policiales. Cada nuevo distrito judicial coincidirá exactamente con uno policial, lo que permitirá –según el comisario mayor– un trabajo conjunto y específico entre fiscales y comisarios.
Además, se amplía la estructura superior: de cinco direcciones de Seguridad se pasa a nueve, y se crean siete subdirecciones generales, una de ellas con funciones clave sobre emergencias e inteligencia.
Como segundo aspecto, subrayó la coordinación operativa y judicial que se vería potenciada a partir de ahora.
La principal novedad del plan, sostuvo, es la integración diaria entre jefes de distrito y fiscales.
“Vamos a tener un comisario trabajando en la zona las 24 horas, con toda la estructura del CAP a su disposición. Esto permitirá actuar con rapidez y con más precisión judicial ante los delitos”, detalló Rey.
De este modo, las autoridades buscan reducir los errores en procedimientos policiales y agilizar las decisiones fiscales.
A modo de ejemplo, Rey comentó que cuando se toma un testimonio los uniformados pueden cometer errores procedimentales que, al final del proceso, entorpecen la tarea de la fiscalía. Ahora, dijo, estos equívocos se van a reducir considerablemente.
Por su parte, la fiscalía va a contar con toda la estructura de la Policía, según Rey.
“No solo va a trabajar con una brigada del departamento de Investigaciones, es decir, con los investigadores. Va tener a su disposición los recursos policiales de un distrito, que es todo el personal de la comisaría, del CAP. Ellos trabajarán como auxiliares de la Justicia en el momento que haga falta”, remarcó.
“La mejor prevención que podemos tener es un delincuente condenado, un delincuente detrás de las rejas. Es mejor que haya un policía parado en cada esquina, porque es muy difícil hacer prevención desde la esquina”, ilustró Rey.
Pero no todo termina allí. El tercer punto que remarcó Rey es que el fiscal tendrá más poder.

Según detalló, al contar con todo el andamiaje de la Policía, la Justicia tendrá “herramientas en tiempo real”. Dicho de otro modo, el plan apunta a aumentar la persecución del delito en flagrancia (cuando se está cometiendo), no sólo con la pata policial, sino con una respuesta rápida y efectiva de los fiscales.
“Es el cambio más importante: el fiscal ya no actuará cuando el delito está consumado, sino en tiempo real, con los elementos para avanzar en investigaciones más eficaces”, añadió el comisario mayor.
Un cuarto aspecto del plan es la digitalización de los procedimientos, y es tal vez una de las novedades menos difundidas pero más operativas.
Rey informó que ya se presentó un sistema de entrega digital de procedimientos, que permitirá a los móviles policiales enviar información desde el lugar del hecho.
Esto incluirá la posibilidad de enviar imágenes y actas durante los operativos y evitará que la Policía deba apostarse largas horas en la oficina de entrega de procedimientos. Según las autoridades, con esto se ganará tiempo en la calle para los uniformados.
Este procedimiento, completó Rey, se realizará a través de la aplicación del Ciudadano Digital (Cidi) de cada uniformado. “Esto reducirá hasta un 80 por ciento el tiempo de espera en las sedes judiciales. Cuando llegue a la Fiscalía, el móvil sólo firmará las actas digitalizadas y se retirará. Es más rápido, seguro y con menos errores”, explicó.
Finalmente, el quinto aspecto distintivo es el desarrollo de “inteligencia basada en datos”. Para ello, Rey describió cómo funcionará la nueva Subdirección General del Centro de Emergencias y Análisis de Información, prevista en el nuevo plan de seguridad.
Esta división asumirá el control del 911, no sólo para recibir emergencias, sino para analizar todas las comunicaciones, denuncias y alertas.
Bajo su órbita también estará la Dirección de Planificación y Diseño, que se encargará de elaborar operativos (de seguridad y deportivos) basados en información científica y estadística.
El rediseño no se limita a la Capital. También se crearán nuevos distritos en ciudades del interior, como Malvinas Argentinas, Río Ceballos y algunas zonas del departamento Colón, con idéntico esquema operativo.
Lo que se espera del plan
“La ciudadanía lo va a notar en la calle. No sólo porque habrá más móviles, más policías y más control, sino porque las investigaciones van a ser más rápidas, más eficaces, y con menos errores que después terminan liberando a delincuentes por tecnicismos”, remarcó Rey.
El jefe policial reconoció que todo cambio genera resistencia. “Pero la resistencia que puede haber no es a la necesidad, sino al cambio de una lógica de trabajo. Nosotros estábamos acostumbrados a intervenir preventivamente y después pasar el caso a la Justicia. Ahora vamos a trabajar juntos, desde el primer minuto”, consideró.
También dijo que entre los grandes cambios, la fuerza espera con expectativas la implementación total del nuevo sistema digital de entrega de procedimientos.
Una vez operativo, permitirá a los uniformados generar y remitir actas desde el lugar del hecho, con geolocalización, imágenes de pruebas secuestradas y un enlace directo con el sumariante de la Fiscalía.

“Es una inversión tecnológica que requiere equipamiento, resguardo de datos y formación del personal. Pero una vez que esté en marcha, el impacto va a ser enorme”, anticipó Rey.
El sistema ya fue analizado y aprobado por los equipos legales de la Policía y ahora se encuentra en proceso de instalación en las fiscalías más activas. “Vamos a ganar tiempo, reducir errores y liberar antes a los móviles para que vuelvan al patrullaje”, destacó.
Una frase que repite Rey y que resume el espíritu del nuevo modelo: “La mejor prevención no es un policía en cada esquina. Es un delincuente condenado y tras las rejas”.
Para que la persecución del delito sea efectiva, Rey confía en que el análisis y la planificación comenzarán a cobrar centralidad en los planes de seguridad.
Por ello remarcó la importancia que cobrará ahora la línea de emergencia 911, porque se va a ocupar de la centralización de toda la información entrante en tiempo real: denuncias, alertas, informes de las unidades judiciales y reportes vecinales.
También coordinará la histórica Dirección de Planificación y Diseño, que a partir de ahora basará todos los operativos de seguridad (urbanos, deportivos, barriales) en análisis estadísticos y de inteligencia.
“Cada procedimiento va a estar planificado con datos, no con intuiciones. Vamos a anticiparnos al delito, no sólo reaccionar”, explicó Rey.