Alejandro Ruffo, acusado de asesinar a su hijo de 8 años en Lomas de Zamora, realizó una estremecedora confesión desde el Hospital Gandulfo. “Lo asfixié para mandarle un mensaje a la mamá”.
Aunque sus palabras no formaron parte de una declaración judicial formal, la fiscalía las incorporó como prueba en el expediente.
El hecho ocurrió el 5 de agosto en la localidad bonaerense. La madre del niño, preocupada por no poder comunicarse con su pareja, alertó al 911. Cuando la Policía llegó al domicilio, encontró a Ruffo malherido tras un intento de suicidio y, en otra habitación, el cuerpo sin vida de Enzo Joaquín, de apenas 8 años.
Desde ese día, Ruffo permanece internado bajo custodia policial mientras avanza la investigación. Según trascendió, en una de las visitas médicas tras retirarle la intubación, Ruffo le dijo a un profesional de la salud: “Lo asfixié para mandarle un mensaje a la mamá”.
La situación judicial de Alejandro Ruffo
La fiscal Fabiola Juanatey, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°2, solicitó que se confirme la prisión preventiva del acusado mientras se reúnen pruebas. Ahora será el juez de Garantías N°8 de Lomas de Zamora, Gabriel Vitale, quien decida en los próximos días.
En paralelo, se fijó una pericia psiquiátrica para el 21 de octubre. El estudio estará a cargo de la perito Carmen Susana Mansilla, de la Asesoría Pericial Departamental, y será determinante para establecer el estado mental de Ruffo y su imputabilidad en el proceso.
Ruffo está imputado por “homicidio agravado por el vínculo, por alevosía y por el propósito de causar sufrimiento a su cónyuge”. En caso de ser hallado culpable, la condena prevista es de prisión perpetua.