El juicio a Marcelo Macarrón, acusado como instigador del homicidio calificado de Nora Dalmasso (51), entró en su tramo final con la caída del testimonio de Alicia Cid, examante del viudo que no puede declarar por razones de salud.
El Tribunal y las partes habían solicitado que Alicia Cid se sometiera a una junta médica para corroborar si se encuentra en condiciones de testificar, lo que fue descartado por su psiquiatra personal. Se informó que la mujer sufrió, en coincidencia con el juicio, un agravamiento de su salud psicológica y emocional.
El fiscal de Cámara, Julio Rivero, dijo que “a tenor de la inteligencia del certificado médico sería un acto de irresponsabilidad, atentatorio del derecho humano, solicitar el comparendo coactivo, para que se presente o se someta a la entrevista”.
En tanto, el mismo Tribunal anunció que se pasó a un cuarto intermedio en el proceso hasta el 5 de julio. Se especula que ese día se llevarán a cabo los alegatos y el tramo final del juicio.
El testimonio que no fue
Este testimonio era considerado clave para ratificar una declaración que sirvió de base a la acusación, para demostrar una crisis de pareja y sustentar sospechas contra el viudo. El fiscal de Cámara admitió que la última declaración de Cid tampoco puede ser incorporada por su lectura, porque fue tomada por el fiscal Luis Pizarro sin control de la defensa, después del dictado de secreto de sumario.
En la misma condición está la última declaración de la madre de Nora Dalmasso, Maria Delia Grassi, que tampoco tuvo control de parte. En la requisitoria, lo que Pizarro destacó que Cid habría dicho en ese testimonio es que “tenía miedo que le pasara lo mismo que a Nora”. La afirmación no podrá ser corroborada.
Marcelo Macarrón no se hizo presente en la audiencia de este miércoles. Tras la última intervención quirúrgica está en reposo en su domicilio.
Llamó la atención al inicio de la audiencia la lectura de una carta de un particular que recibió el presidente del Tribunal, en la que arriesga una hipótesis de incesto de la cual nunca hubo indicio ni prueba.
En el audiencia se leyó la declaración del médico policial Juan Enrique Ribecky (ya fallecido) que fue el primero en llegar al lugar del crimen y ratificó que el cuerpo de la víctima fue hallado semitapado.
En la jornada 38 del juicio al viudo también hubo un cambio en el jurado popular. Un jurado titular debió ser internada por un problema de vesícula. Una suplente asumió su lugar en el estrado.
