Silvia Lopresti, la mujer agredida en un campo de golf en Pinamar días atrás y relató en las últimas horas los escalofriantes detalles de la golpiza que sufrió a manos de una pareja que fue imputada por lesiones.
“Me pegó con un palo de golf en la cabeza, el palo se rompe, yo me caigo, quedo atontada y veo que agarra otro palo para seguir pegándome, pensé ‘estoy en el horno’”, contó Lopresti a Pinamar Diario.
El ataque se produjo luego de que una pelota de golf golpeara en el tobillo a la amiga que acompañaba a Lopresti. A pesar de que la amiga se disculpó y les dijo a los agresores que se iban, la pareja, identificada como Girini y su esposa, comenzaron a insultarlas con frases como “negras ratas”, “no conocen la diferencia entre la playa y un campo de golf” y “vayan a tomar mates a Ostende”.
Cansada de los insultos, Lopresti les contestó a los agresores, momento en el que comenzó la brutal agresión. La dejaron tirada en el piso con golpes en distintas partes de su cuerpo, teniendo que ser auxiliada por vecinos del lugar.
Lopresti expresó su incomprensión ante el nivel de violencia de la pareja y se mostró satisfecha con la decisión del club de golf de Pinamar de suspender a los agresores. “Mi marido practica golf, otros familiares también y entendemos de qué se trata y esto que nos pasó a nosotros no tiene nada que ver con el deporte”, afirmó.
Imputados
El fiscal general de Dolores, Diego Escoda confirmó en las últimas horas la imputación por “lesiones leves” en las últimas horas a Mariano Girini y Celeste López, la pareja que días atrás agredió a una jubilada de 61 años que se encontraba tomando mates en un campo de golf de la ciudad bonaerense de Pinamar.
Según indicó el fiscal a Clarín, por el momento no declararon, pero se los llamará a indagatoria.
Además, rige como medida cautelar la prohibición de acercarse a la víctima.
Qué pasó en el campo de gol de Pinamar
Una mujer de 61 años fue brutalmente agredida en un campo de golf de Pinamar, en la costa atlántica, por otra mujer que, según la víctima, la discriminó por su origen social.
El hecho ocurrió el pasado martes pero el video del ataque se viralizó en las últimas horas, luego de que la propia víctima contara cómo sucedieron las cosas.
Una jubilada fue atacada a palazos por tomar mate en un campo de golf en Pinamar
S.L., oriunda de City Bell, La Plata, relató que la agresión tuvo lugar mientras disfrutaba de una tarde al aire libre junto a una amiga en un predio de la avenida Enrique Shaw. La mujer, que suele visitar el campo de golf para relajarse, afirmó que se encontraba al margen de la zona de juego cuando la agresora, una mujer de 44 años que practicaba golf con su pareja, comenzó a lanzar pelotas en su dirección.
“Empezamos a ver algo raro porque las pelotas volaban muy rápido. A esta gente le molestaba nuestra presencia y empezaron a tirar para nuestro lado”, declaró S.L. a Infobae.
Ante esta situación, la víctima decidió acercarse a la pareja para dialogar sobre las normas del deporte. Sin embargo, la respuesta que recibió fue un ataque violento e inesperado.
“Me pegaron como a una rata”
“De la nada, con el palo que tenía en la mano, me pegó en la cabeza. El palo se partió y el golpe me dejó atontada. Después sacó otro y me volvió a pegar”, describió.
La víctima asegura que la agresión estuvo acompañada de insultos racistas y despectivos. “Me decía: ‘Váyanse, ratas. Pago 50 mil dólares para estar acá, esto no es Ostende. No tienen que estar acá’”, relató. “Me pegaron como a una rata”.
Un testigo presente en el lugar grabó los momentos posteriores al ataque. En las imágenes se puede observar a la pareja alejándose mientras la víctima yace en el suelo, llorando. “Me partió el palo en la cabeza, loca de mierda”, se escucha decir a la víctima entre lágrimas. En el video también se oye el pedido de auxilio de la amiga de S.L. y la respuesta de la agresora: “No tiene que estar acá”.
S.L. sufrió heridas en la cabeza y otras partes del cuerpo y fue trasladada a un hospital local para recibir atención médica. Posteriormente, presentó una denuncia en la Comisaría Primera. La víctima informó que la pareja acusada es propietaria de una farmacia en la zona.
La causa está a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción N°4 de Pinamar, dirigida por el fiscal Juan Pablo Calderón, y fue caratulada como lesiones. S.L. indicó que continúa con dolores y mareos tras el ataque. “Me duele la cabeza. Ahora estoy por entrar al médico. Estoy haciéndome estudios porque no me siento bien”, contó.