Una mujer de 42 años fue rescatada este sábado en una casa de un barrio privado de Costa Esmeralda, al norte de la localidad balnearia de Pinamar, luego de que a través de mensaje de audio le pidiera auxilio a una familiar para denunciar que estaba siendo retenida y abusada por su pareja, informaron fuentes judiciales y policiales.
El allanamiento donde se liberó a la mujer, de la que se resguarda su identidad, se realizó en una propiedad de Costa Esmeralda, donde la Policía halló a la víctima junto a sus hijos menores de edad, y ella ratificó que estaba allí contra su voluntad.
Los efectivos también pusieron a resguardo junto a su madre a los tres hijos de la pareja, de 5, 8 y 10 años.
El procedimiento fue realizado en el marco de una causa por violencia de género cuya denuncia original se hizo el sábado en la Comisaría de la Mujer de San Fernando, ya que tanto la víctima como el imputado tienen domicilio en una casa de las islas del delta de San Fernando, que también fue allanada y donde se secuestraron siete armas de fuego.
La causa está a cargo del fiscal Matías López Vidal, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Violencia de Género de San Fernando, quien ordenó los allanamientos de urgencia y la detención de J.C.A., de 52 años.
El hombre es propietario de una gomería en el partido de Tigre, según señalaron los voceros.
Fuentes judiciales indicaron que si bien se aguarda el testimonio completo de la propia víctima, todo se inició la semana pasada cuando luego de un conflicto de pareja y de que la mujer le dijera que quería separarse, el hombre la amenazó de muerte con armas de fuego y la llevó contra su voluntad a una casa que la pareja tiene en el mencionado barrio de Costa Esmeralda.
“La amenazó con armas, le dijo que no lo podía dejar, que iban a ser una familia perfecta y, obligada, la subió a la camioneta y la llevó junto a los hijos a Costa Esmeralda, donde la aisló y le quitó el celular”, explicó un investigador judicial.
Según el vocero, una tía de la víctima logró visitarla en Costa Esmeralda y, aprovechando un descuido del ahora detenido, la mujer logró enviarle un mensaje de audio contando lo que estaba sucediendo a su hermana, quien fue la que se presentó a formular la denuncia, lo que motorizó el allanamiento.
En paralelo, el fiscal López Vidal dispuso allanar hoy también, con personal de la DDI San Isidro, el domicilio de la pareja, situado en el Canal de la Serna, Segunda Sección, Islas del Delta de San Fernando, donde se encontraron varias armas.
Voceros policiales detallaron que allí se secuestraron un revólver marca Taurus calibre 357 Magnum, otro marca Rubi .32 largo, un rifle Sig Saur con mira calibre 22, una carabina Rubi también con mira y calibre 22 largo, una escopeta marca Centauro calibre 16 y otra de doble caño marca Baykal calibre 12/70, un rifle de aire comprimido calibre 5,5 y mil cartuchos de diversos calibres.
A su vez, se secuestró un cinturón sujetador y otros elementos que podrían estar relacionados al abuso denunciado por la víctima.
Una comitiva policial iba a trasladar en las próximas horas al imputado J.C.A. desde la costa a la DDI San Isidro, donde quedará alojado hasta tanto sea indagado posiblemente mañana por el fiscal López Vidal.
Si bien el fiscal esperaba la testimonial de la víctima para terminar de definir la imputación, los delitos por los que el acusado será indagado serían “privación ilegal de la libertad, abuso sexual y amenazas”, todo en contexto de violencia de género.
