Un efectivo de policía de Rosario pelea por su vida luego de haber sido blanco de una ráfaga de ametralladora cuando intentaba identificar a los ocupantes de un automóvil en un control de rutina.
El policía, que trabajaba en la Brigada Motorizada, se encontraba haciendo un control rutinario en Arijón al 400, en la zona sur de la ciudad santafesina, según publica el diario Clarín.
Estaba junto a un compañero cuando intentaron identificar a los pasajeros de un Peugeot 207 de color blanco. Les hicieron señas para que se detuvieran, pero como toda respuesta recibieron disparos de ametralladora. Fue una ráfaga violenta, que tomó por sorpresa a los dos policías.
Según fuentes médicas, el estado del policía es crítico. A la par, otros efectivos que se encontraban cerca del agente que recibió la ráfaga contactaron al 911 para armar un operativo de seguimiento de Peugeot.
Unos minutos después, pudieron encontrar el auto en la esquina de Ayacucho y Hungría, a unas 15 cuadras del lugar del ataque, en la zona del parque Sur. El coche había sido robado en abril de este año.
Cinco detenidos
A unas cuadras del lugar donde se halló el coche, la policía logró detener a cinco personas relacionadas con el ataque. Se trata de dos menores de edad, una mujer y tres hombres, que se encontraban en posesión de un arsenal de guerra: dos pistolas (calibre nueve milímetros) y dos ametralladoras (de nueve milímetros).
El agente que fue herido es oriundo del departamento de San Javier, por lo que su familia se encontraba viajando a Rosario para acompañar al joven policía en la clínica.