La causa por la muerte de Diego Maradona experimentó recientemente una acelerada reactivación con la designación de nuevos jueces y la convocatoria a una audiencia fundamental que marcará el punto de inicio del nuevo proceso judicial. A solo 24 horas de la conformación del tribunal, los magistrados citaron a las partes involucradas y buscan celeridad en el proceso.
El Tribunal Oral en lo Criminal Nº7 de San Isidro, ahora integrado por los jueces Pablo Adrián Rolón, Alberto Gaig, y Alberto Ortolani, es el encargado de llevar adelante este nuevo proceso. La necesidad de un nuevo tribunal surgió tras la nulidad decretada en el primer juicio en mayo, a raíz del escándalo relacionado con la jueza Julieta Makintach.
La audiencia clave se llevará a cabo este viernes a las 10 en el palacio judicial de la calle Ituzaingó. Deberán estar presentes los representantes del Ministerio Público Fiscal, así como los abogados querellantes y defensores de los siete imputados que formaban parte del debate anulado. Es importante destacar que la defensa de la enfermera Gisela Dahiana Madrid, quien iba a un juicio por jurados, no está citada a esta jornada.
Esta reunión es crucial porque marca el punto de inicio para el nuevo juicio, aunque no es el comienzo del debate oral en sí. Los nuevos magistrados deberán abordar varios planteos clave formulados por los letrados durante los meses de pausa.
Entre las cuestiones a definir se encuentra el alcance de la nulidad decretada. Los jueces deberán establecer si la resolución solo anuló el proceso de dos meses y medio que estaba en curso o si también aplica a instancias anteriores, lo que implicaría rehacer audiencias previas al juicio.
Otro punto central será la solicitud presentada por la defensa del neurocirujano imputado, Leopoldo Luque, quien pidió enfrentar un juicio por jurados popular. El planteo se fundamenta en la normativa constitucional y procesal penal de la provincia de Buenos Aires, que permite este tipo de juicio para delitos con una pena máxima que supere los 15 años de prisión, umbral que excede la acusación de “homicidio simple cometido mediante dolo eventual” que pesa sobre los imputados.
Además, el tribunal se encontrará con nuevas caras en los equipos de abogados. En este período de pausa, dos de los siete imputados sumaron defensores a sus equipos:
- Leopoldo Luque incorporó al letrado Francisco Oneto, quien se une a Julio Rivas, Mara Digiuni y Pablo Speranza.
- La psiquiatra Agustina Cosachov sumó a los defensores Christian Eduardo Carlett y Marcelo Rodríguez Jordan a su abogado Vadim Mischanchuk.
Las autoridades judiciales ya enfatizaron la necesidad de fijar un nuevo debate con la mayor premura posible para evitar mayores dilaciones y asegurar la operatividad del servicio judicial.
La repercusión pública generada por la frustración del debate anterior impuso “un deber reforzado de celeridad institucional” para preservar la confianza en el servicio de la Justicia.
Si el proceso fluye sin nuevos obstáculos, los jueces podrían fijar una siguiente audiencia para la vuelta de la feria judicial, con el objetivo de avanzar en la elección de pruebas y, eventualmente, establecer la fecha para el inicio del nuevo juicio oral.