La tragedia ocurrió en el Parque Nacional Serra Geral, Brasil. La niña cayó del cañón Fortaleza, el más grande del país. La víctima fue identificada como Bianca y estaba acomapañada por su familia.
Oriundos de Curitiba, los padres y los tres menores se encontraba de vacaciones en el lugar. Lamentablemente, el resto de la familia presenció la tragedia.
Según contaron los medios locales, ocurrió mientras descansaban en un banco donde iban a comer, el jueves al mediodía.
La niña, que tenía trastorno del espectro autista (TEA), corrió de repente hacia el acantilado, que no cuenta con protección. Su padre intentó evitar que cayera al cañón, pero no pudo alcanzarla a tiempo.
Se inició la operación de rescate, pero las condiciones climáticas no permitieron el accionar inmediato de los rescatistas.
De la operación participaron las brigadas de Bomberos de Rio Grande do Sul y el Batallón de Búsqueda y Salvamento de Porto Alegre, con el apoyo de helicópteros de la Brigada Militar.
El accidente ocurrió alrededor de las 13:30 y a las 17:30, un drone equipado con cámara térmica localizó a la niña a unos 70 metrosdel punto de caída.
10 horas mas tarde, se pudo realizar el rescate por medio de cuerdas y técnicas de rapel.
Lamentablemente, ya era tarde. Los rescatistas solo pudieron constatar que había muerto.
