En una caja de un juguete infantil venía oculto un “pan” con 1,74 kilos de cocaína. La caja venía dentro de una encomienda que traía un pasajero que viajaba en un colectivo con destino Córdoba desde Salta.
La incautación se hizo luego de que los perros antinarcóticos de la Sección de Seguridad Vial “Sinsacate” del Escuadrón 65 de Gendarmería detectaran con su olfato que podía haber drogas ocultas en el equipaje que estaba en la bodega. Esto se dio en un operativo de prevención vial sobre la Ruta Nacional N° 9, kilómetro 758.5, en el que se controló al colectivo.
Mientras desarrollaban la inspección, los gendarmes observaron que el perro reaccionaba en forma clara, como lo hace habitualmente cuando está en presencia de estupefacientes. Siguiendo las indicaciones del perro, llegaron a la encomienda que tenía la caja de juguetes y el paquete con cocaína.
El narcotest dio positivo para “cocaína” y la balanza estableció que el peso incautado en este paquete era de 1,74 kilos.
En el mismo control, el perro detectó otra encomienda. Ante esta situación el Juzgado Federal N° 1 de Córdoba, orientó la entrega vigilada y detención del ciudadano receptor de la segunda caja que contenía 582 gramos de cocaína.
También se secuestraron dispositivos móviles, que ahora servirán para establecer nexos y relaciones.
