La desaparición de Delia Gerónimo Polijo (14) se suma a las de otras tres mujeres sucedidas en Traslasierra desde 2014.
Si bien los casos sucedieron en el mismo valle y coinciden en que son investigados por el mismo fiscal (Raúl Castro), se trata de sucesos y enigmas bien diferentes.
Lo concreto es que en ninguno de estos casos se han logrado datos ciertos, situación que alimenta el temor y las más diversas versiones en la región. Las investigaciones siguen abiertas.
El 2 de febrero de 2014, Marisol Reartes (18) salió alrededor de las 8 de la mañana de la casa de su madre en una zona rural de Villa de las Rosas.
Llevaba en brazos a su hija Luz Morena Oliva, de 2 años.
Todo indicaba que se dirigía por un rato a la localidad de Los Hornillos, donde viven sus hermanas. Nunca llegaron.
Diez días después, el 12 de febrero, Silvia Gloria Gallardo (34), vecina de la localidad de San Javier-Yacanto, desapareció cuando se disponía a viajar hacia Córdoba capital, donde trabajaba.
Según el expediente, habría sido vista por última vez en la terminal de la ciudad de Villa Dolores.
En todos los casos bajo investigación no sólo se han cumplido con todos los protocolos de búsqueda, sino que además se han hecho incontables procedimientos, aseguran fuentes oficiales.
Si bien hay sospechas y presunciones, en ningún caso hay imputaciones, detenidos o datos ciertos.
En todos los casos, familiares y amigos realizaron diversas manifestaciones pidiendo la verdad.
Meses atrás, el Gobierno (con la venia de la Justicia provincial) ya había ofrecido una recompensa de 200 mil pesos para quien aportara información fidedigna sobre los paraderos de Marisol y su hija.
“Ahora tenemos un poco más de esperanzas, ahora que hay plata de por medio puede que alguien informe algo, nos gustaría que esto se hubiese decidido antes, y no cuatro años después”, le dijo Gloria, hermana de Marisol, a este diario, semanas atrás.
Lamentablemente, ese ofrecimiento y la búsqueda no han brindado datos concretos.