El misterio que rodeaba el asesinato de Luis Alberto Troche, un comerciante de 56 años hallado sin vida en su local de cobros de servicios de Esteban Echeverría, parece estar esclarecido para los investigadores del Departamento de Homicidios de la Policía de Buenos Aires.
El domingo 14 fue capturado el principal sospechoso, identificado como Rolando Giménez Olivella, un sicario de 28 años y nacionalidad paraguaya, presunto autor material del crimen.
Junto a él, también fue detenido L.A.F.B., dueño de una remisería, acusado de encubrimiento por haber facilitado un salvoconducto al sospechoso el 13 de septiembre, día en que Troche fue asesinado.
Una cita fatal frente a la comisaría
El crimen ocurrió el pasado 13 de septiembre en el local de Rapi Pago ubicado en Ruta Provincial 4 al 6031, en la zona de Transradio, casualmente frente a una comisaría. La investigación sugiere que el homicidio se habría cometido en menos de 5 minutos.
La víctima, que fue encontrada sin vida en el baño con lesiones cortantes en el rostro y el pantalón bajo, conocía a su asesino. Un testimonio clave fue el de una clienta que se encontraba en el local. Ella relató que, mientras esperaba, ingresó el sospechoso, y Troche comentó: “Me está esperando a mí”. La testigo afirmó que ambos se conocían.
El sospechoso Rolando Giménez Olivella es sindicado como un sicario vinculado a una banda narcocriminal dirigida por un tal Gómez. Esta vinculación se reforzó cuando otro chofer de la remisería relató haber trasladado a dos personas identificadas como “Kpe” y “Kpe Antonio” hasta Ingeniero Budge, observando que llevaban armas largas y estupefacientes. El análisis del celular de la víctima reveló que mantenía intercambios de mensajes íntimos con el número atribuido a “Kpe” desde el 30 de agosto pasado.
Pistas cruciales en el esclarecimiento
La investigación, a cargo de la UFI 2 de Esteban Echeverría bajo la fiscal Verónica Ciffarelli, utilizó las cámaras de seguridad del local. Los registros fílmicos mostraron al sospechoso ingresar a las 17.13 con un buzo oscuro y gorra, y retirarse a las 17.29 ya sin esas prendas, vestido con una remera blanca con la inscripción “San Agustín”.
Siguiendo las cámaras, se observó al hombre caminar y luego correr, desapareciendo en la zona de Rastelli y Moreno. Se presume que allí fue recogido por un vehículo provisto por el dueño de la remisería hoy detenido. Las pistas de la remisería llevaron a un Chevrolet Corsa negro que levantó a un pasajero en la zona de Larabida y Restelli, vehículo que trabajaba para la remisería del barrio El Fortín, propiedad de L.A.F.B.
¿Ajuste de cuentas o crimen pasional?
A pesar de las detenciones, aún resta determinar el móvil exacto del homicidio. Las preguntas que rodean el caso incluyen si se trató de una cita amorosa, un ajuste de cuentas, o si está relacionado con los préstamos personales que ofrecía la víctima o la deuda asociada a la reciente compra de una propiedad.
Se secuestraron elementos financieros de interés, como tres libretas con anotaciones sobre préstamos informales y un recibo de compra de una propiedad por 300 mil dólares con fecha del 29 de agosto. Sin embargo, la pareja de la víctima detalló que la propiedad, ubicada en el barrio 9 de Abril, fue adquirida en julio por 160 mil dólares, con un pago inicial de 40 mil y cuotas posteriores de 3 mil.
Los allanamientos y las pruebas incautadas
Tras confirmar el vínculo íntimo entre la víctima y el número de “Kpe”, este domingo se realizaron allanamientos de urgencia en Esteban Echeverría e Ingeniero Budge. En la detención de Rolando Giménez Olivella, autor material del homicidio, se secuestraron elementos comprometedores:
- Un par de zapatillas blancas.
- Una campera rompeviento verde.
- La remera blanca con la inscripción “San Agustín” con manchas hemáticas, la cual fue descartada en la basura.
- Un pantalón lavado y tendido.
- 40 proyectiles calibre 9 milímetros.
- Dos teléfonos celulares y una boleta de transferencia de Western Union a nombre de una mujer.
Ambos detenidos, Rolando Giménez Olivella y L.A.F.B., quedan a disposición de la Justicia mientras se aguarda la apertura del celular del principal sospechoso, que será clave para esclarecer el móvil definitivo.