Un terremoto de magnitud 7,3 causó este martes severos daños en la capital de Vanuatu, Port Vila, que se vio afectada por cortes de comunicación y donde equipos de rescate buscan a posibles víctimas mortales entre los escombros mientras los servicios de emergencia del país atienden a decenas de heridos.
Vanuatu, oficialmente la República de Vanuatu, es un país soberano insular ubicado en Oceanía, localizado en el océano Pacífico Sur. El archipiélago, que es de origen volcánico, se ubica a unos 1750 km al este de Australia, 500 km al noreste de Nueva Caledonia, al oeste de Fiyi y al sur de las Islas Salomón, cerca de Nueva Guinea. Su nombre inicial fue Austrialia del Espíritu Santo, y posteriormente los ingleses le cambiaron el nombre al de Nuevas Hébridas. Se trata de un conjunto de islas con playas paradisíacas.
Terremoto en Vanuatu
El sismo ocurrió a las 12.47 hora local (01.47 GMT), con el epicentro localizado unos 30 kilómetros al oeste de la capital de Vanuatu y a una profundidad de 57,1 kilómetros bajo el lecho marino, según el Servicio Geológico de Estados Unidos, que registra la actividad sísmica en todo el mundo.
El Centro Sismológico Euromediterráneo (EMSC), por su parte, elevó la magnitud del temblor a 7,4.
La cadena de televisión VBTC, uno de los pocos medios que publicó imágenes desde el terreno, mostró cómo decenas de personas acudían a un centro hospitalario capitalino en furgonetas, coches y transportados en brazos por terceros, así como carreteras bloqueadas por deslizamientos de tierra y edificios y vehículos destrozados.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó en su cuenta de X que ha desplegado un equipo sobre el terreno que asiste al Hospital Vila Central y al Ministerio de Salud en las acciones de emergencia.
Se desconoce por el momento el número preciso de víctimas, sin que las autoridades de Vanuatu hayan informado al respecto.
En su cuenta de X, Katie Greenwood, jefa de delegación de la Federación Internacional de la Cruz Roja en el Pacífico, señaló que hay al menos 6 fallecidos y muchos heridos, y que la comunicación con los equipos sobre el terreno se ve afectada por las interrupciones en los servicios de comunicación.
Dan McGarry, periodista en Vanuatu, dijo por su parte a la agencia EFE que las autoridades policiales en Port Vila le informaron de la muerte de una persona y que él mismo vio poco después del terremoto varios heridos, entre ellos tres “graves”.
El reportero advirtió que por el momento se desconoce la magnitud de los daños fuera de la capital por el corte en las comunicaciones.
Varias réplicas
“El terremoto fue extremadamente violento, tuve solo tiempo de coger a mi hijo del brazo y salir al garaje, pero nos caímos al suelo al tratar de agarrar a mi mujer”, dice a la agencia EFE por mensaje desde Port Vila Stéphane Rivier, que comparte imágenes del impacto en su propiedad, con daños de un “90%”, calcula.
La familia se declara a salvo y señala que ha habido unos “10 ó 12″ temblores desde el primero.
Tras el primer fuerte temblor, se registraron otras dos réplicas de 5,5 y 5,4, según el Servicio Geológico de EE.UU.
Varias embajadas informaron de daños en sus edificios en Vanuatu. La Embajada de EE.UU. publicó un comunicado en el que afirma que su edificio en Port Vila ha sufrido “daños considerables” y que “está cerrada” hasta próximo aviso.
Posteriormente publicó otro comunicado en el que afirma que todo su personal de la legación se encuentra a salvo.
El ministro de Exteriores de Nueva Zelanda, Winston Peters, indicó por su parte en X que su legación en la capital, que comparte espacio con la de EE.UU., Francia y Reino Unido, ha sufrido “daños significativos”.
Igualmente, la ONG CARE señala en un comunicado que su oficina en Port Vila ha sufrido daños y que “muchos edificios han colapsado” en la urbe. “La electricidad y el agua están cortados en la mayor parte de la capital”, de cerca de 50.000 habitantes, añade.
Según el observatorio independiente de seguridad cibernética NetBlocks, la conexión a internet prácticamente se perdió en Vanuatu tras el terremoto.
La filial de Vodafone en Vanuatu indicó en un mensaje publicado en Facebook que los servicios técnicos han logrado restablecer el servicio de llamadas internacionales, mientras que aún trabajan para recuperar el servicio de internet en el país.
Por su parte, algunas aerolíneas, entre ellas Jetstar y Qantas, anunciaron hoy la cancelación de sus vuelos a Port Vila programados para esta semana ante “informes de posibles daños” en el aeropuerto de la capital.
Tras el sismo, el Centro de Alertas de Tsunamis del Pacífico, con sede en Honolulu, activó la alerta de tsunami, que se suspendió posteriormente.
El archipiélago de Vanuatu, con unos 250.000 habitantes, está situado cerca del llamado Anillo de Fuego del Pacífico y de los volcanes submarinos de la Cuenca de Lau, por lo que registra habitualmente sacudidas de origen sísmico.