En el marco de otro grave episodio criminal en Córdoba, una joven de 22 años fue ubicada y rescatada por investigadores de la Policía provincial luego de una serie de operativos en barrio Marqués Anexo, en la zona norte de la Capital.
Al ser localizada, la chica denunció que había estado maniatada con alambres y cautiva en una casa a manos de una pareja y que se había escapado cuando el hombre se durmió. La chica presentaba lesiones y se encontraba alterada.
En sus piernas se observaban marcas de sujeción.
Los investigadores policiales y judiciales habían llegado al barrio precisamente luego de una alerta anónima que ingresó al 911 y que daba cuenta de ese rapto.
Como resultado de los operativos, ordenados por el fiscal Andrés Godoy, fueron detenidos un hombre y una mujer que serían pareja.
Dante Rolando Arrieta (66) y Norma Chavero (72) quedaron detenidos.
De manera inicial, fueron imputados como presuntos autores de privación ilegítima de la libertad, según indicaron fuentes de la causa.
Al parecer, de acuerdo a los voceros, el individuo habría tenido raptada a la joven luego de que ella decidió interrumpir presuntamente un vínculo que había entre ellos.
La joven recibe tratamiento psicológico por estas horas. Trascendió que es una víctima muy vulnerable.
Como si lo anterior no fuera lo suficientemente grave, no menos serio es que en la casa allanada se encontraron armas de fuego, cartuchos de escopetas y balas y hasta un chaleco de protección balística robado a la Policía de Córdoba.
No es la primera vez que un chaleco de este tipo es encontrado en manos de la delincuencia en los últimos tiempos en Córdoba.
Entre el armamento secuestrado, había una pistola Bersa calibre 9 milímetros. Altas fuentes oficiales negaron que hubiera pertenecido a la fuerza policial provincial.
Además, se hallaron dos armas tipo tumberas.

Armas no tan ocultas
La sospecha es que esas personas presuntamente integrarían una banda que se dedicaba a cometer delitos.
No está claro si asaltaban a automovilistas o a choferes de aplicaciones o si alquilaban esos elementos a otras bandas para que cometieran robos, o era todo eso junto.
De confirmarse esa sospecha, también hay que decir que no sería la primera vez que es desarticulada una banda que se dedica a alquilar armas a la delincuencia en Córdoba.
En los últimos tiempos, se ha logrado desbaratar a distintos grupos vinculados a este tipo de actividad en allanamientos en la capital cordobesa. Incluso ya se ha dado con grupos que, según las sospechas judiciales, alquilan armas o bien las usan para cometer robos y venganzas, a pedido de terceros.
Todo esto es ahora objeto de una investigación por parte de la fiscala Claudia Palacios, quien quedó a cargo de esa parte de la compleja pesquisa.
Desde la fiscalía se han dado directivas a los detectives para que se profundizaran las averiguaciones, la toma de testimonios, las búsquedas de testigos y distintos rastreos tecnológicos. En los allanamientos se han hallado celulares.
Fuentes con acceso a la causa señalaron que al hombre se le añadieron otras imputaciones, como tenencia ilegal de arma de guerra y de uso civil y otros delitos vinculados a la violencia de género.
Por ahora, se desconocen las versiones de los dos acusados y la de sus abogados.
La causa del cautiverio pasó al fuero de violencia familiar. Actúa la Fiscalía Nº 5.

Llamado de alerta y rescate
Todo se inició de manera repentina el pasado domingo a las 20.
Una persona alertó a la Policía y denunció que una joven se encontraba cautiva en una casa cerca de una escuela de Marqués Anexo.
La información daba cuenta de que se encontraba atada con alambres por parte de los ocupantes de la casa y que era golpeada.
El llamado parecía absolutamente real, dado que se daban ciertos detalles absolutamente verosímiles.
Tras una serie de averiguaciones de rigor, la información fue girada a Brigadas Civiles de la Policía y a la unidad judicial.
El fiscal Andrés Godoy decidió actuar de urgencia y dispuso una serie de allanamientos y operativos con efectivos de civil y uniformados.
Así fue como distintas brigadas llegaron al barrio y se concretaron operativos en la manzana 41.
El punto central es que la joven en cuestión no fue localizada en un primer momento.
Esto terminó de encender todas las alertas y el nerviosismo de los pesquisas fue en aumento: ¿dónde estaba? ¿Qué había pasado con ella?

La sorpresa: armas y un chaleco
En la vivienda allanada a la pareja, los investigadores hallaron numerosas armas de fuego que no se esperaban encontrar.
Fuentes oficiales indicaron que se secuestraron una pistola 9 milímetros Bersa, un cargador, un revólver calibre 22, otro revólver roto, una escopeta 16, dos armas caseras tipo tumberas y una amplia cantidad de balas de varios calibres (algunos eran proyectiles ya disparados) y cartuchos de escopeta.
Como si fuera poco, los policías encontraron un chaleco antibalas que había sido robado a la Policía de Córdoba en fecha por determinar.
Tanto el hombre como la mujer quedaron detenidos de inmediato.
Frente a la casa, se encontró un vehículo Nissan Tida negro, estacionado en la calle, y que había sido robado el pasado 14 de este mes en la jurisdicción de Alta Córdoba, según fuentes oficiales.
Aparición de la joven
Ya al filo de la medianoche, la joven finalmente fue encontrada por una patrulla policial y en la misma zona, lo que trajo alivio a los investigadores y a los funcionarios judiciales que ya analizaban qué pasos seguir.
Voceros de la causa resaltaron que la joven se encontraba alterada y con un profundo cuadro de angustia.
La propia joven, según fuentes de la causa, les relató a los policías que había estado “cautiva” en esa casa, que había permanecido “maniatada” y que se había “escapado” cuando el hombre se acostó a dormir.
En una libreta, quedó consignado que presentaba lesiones de ataduras por lo menos en una pierna.
Una de sus zapatillas tenía un agujero compatible con el tamaño que deja una bala, añadieron voceros del caso.
Por directivas judiciales, se activó el protocolo de atención a una víctima de violencia de género.
Se espera que, con el paso de las horas, la chica pueda declarar y brindar datos centrales.
Al parecer, según fuentes de la causa, el individuo habría tenido cautiva a la joven luego de que ella decidió interrumpir un vínculo que tenían. La joven víctima recibe tratamiento psicológico.
No cesa la conmoción en Marqués Anexo, un barrio que desde hace años es sacudido por graves casos.