Una mujer de 65 años fue hallada sin vida luego de intentar separar a dos de los cinco bulldogs americanos de su hijo, que se estaban peleando. Fue atacada por uno de los perros y sufrió “lesiones espeluznantes”. Ocurrió en la ciudad de Liverpool, Inglaterra.
La víctima fue identificada como Ann Dunn, trabajaba como empleada doméstica y debía asistir a la escuela de su nieto para retirarlo. Sin embargo ella nunca llegó y la situación se descubrió luego de que desde el centro educativo alertaron a la familia porque nadie había pasado a buscar al menor.
La investigación indica que fue atacada ferozmente por Bronx, un bulldog americano de tres años que se estaba peleando con Cairo, otro de los perros de su hijo. Cuando la hallaron tenía “lesiones espeluznantes” en los brazos, las piernas y el cuello, incluidos huesos rotos y marcas de mordeduras “hasta los huesos”, según el informe forense.
La víctima solía cuidar a los cinco perros en su casa. Se encontraba sola al momento del ataque. Su hijo, Stephen Dunn Jr, de 31 años, contó que los animales nunca habían sido violentos antes.
La última conversación que mantuvo con su madre fue ese mismo día, alrededor de las 13, cuando ella le avisó que dejaría salir a Bronx de la habitación donde estaba encerrado, él le advirtió que no lo deje encontrarse con Cairo. Al momento que la escuela le notificó que la mujer nunca llegó, él volvió rápidamente a su casa.
Wirral Andre Rebello, forense principal de la ciudad, indicó: “Encontraron a Ann tendida en el pasillo e inconsciente, en medio de un charco de sangre. Estaba boca abajo y cubierta por una toalla empapada de sangre. Ambos de sus brazos mostraban evidencia de marcas de mordeduras, junto con sus piernas”.
“La mascota sometió a Ann a un ataque sostenido y significativo, le causó graves lesiones en múltiples partes del cuerpo. Se desplomó en el pasillo y murió a causa de las heridas”, indicó.
El caso ocurrió en el año 2022, aunque llegó a la corte en el último tiempo. El día del ataque, el hijo de la mujer fue detenido brevemente por la sospecha de ser el dueño de un perro peligroso y fuera de control. Los cinco animales fueron incautados y sacrificados.
