Los barrios José Ignacio Díaz y Talleres Sur, apenas separados por una avenida en la franja sudeste de la ciudad de Córdoba, volvieron a ser escenario de la violencia urbana con una brutal pelea entre dos bandos. Hubo al menos 21 balazos en plena calle.
A raíz de la balacera, un hombre cayó malherido en la esquina de Carlos Gervasoni y avenida De los Sauces. Poco después moriría. Edgardo Gustavo Martínez tenía 40 años.
Por ahora, no hay detenidos y la Policía trabaja para desentrañar cómo sucedieron los hechos y para dar con los involucrados.
Todo comenzó el domingo alrededor de las 16. Según relataron referentes barriales que pidieron resguardo de su identidad, una banda integrada por jóvenes se desplazó a esa hora por calle Sofía Capdevila de Luque hacia avenida De los Sauces.
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Durante esa recorrida comenzaron a escucharse los primeros balazos, que habrían sido efectuados por dos hombres en una motocicleta.
La pelea se habría desarrollado –según habitantes de este mismo sector– entre esa esquina y la ochava de Carlos Gervasoni y De los Sauces. Durante ese trayecto de 100 metros, unos a otros se habrían disparado sin piedad.
“La Policía juntó 11 vainas de armas de grueso calibre en la primera esquina y otras nueve en el lugar donde hirieron a la víctima”, contó un comerciante del lugar.
En efecto, alrededor de las 16.30, un llamado de emergencia alertó a la fuerza de seguridad sobre lo que estaba ocurriendo.
Al llegar, los policías se encontraron con 21 vainas de distinto calibre: tres 9 milímetros, cuatro calibre 40, 13 calibre 38 y otro proyectil sobre el que resta detectar sus características.
Ese era el único rastro que había dejado la riña, según fuentes de la Policía.
En tanto, un grupo que habría sido partícipe del enfrentamiento, entre el cual figuran integrantes con antecedentes delictuales (según información policial), llegó al hospital San Roque, a 20 cuadras del lugar de los hechos.
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El grupo iba en un Ford Ka rojo. Llevaban a un hombre que agonizaba tras haber sido alcanzado por un balazo.
El proyectil había impactado en el abdomen, por lo que fue operado y quedó bajo observación. Su delicado estado de salud hacía prever el peor desenlace.
Seis horas más tarde, alrededor de las 22, personal del hospital dio aviso a la Policía sobre el fatal desenlace: el hombre había muerto.
El caso está en manos de la fiscal Lourdes Quagliatti, quien ordenó las primeras acciones de investigación. Los pesquisas se dedicaron por horas al relevamiento de la zona, con el fin de hallar filmaciones de cámaras que pudieran haber registrado el enfrentamiento.
También se consultó entre los diferentes habitantes del sector, aunque el código de comunicación siempre fue el mismo: el silencio.
En el marco de la tarea investigativa, los detectives dieron con una filmación de un domo en la que se observan parte del enfrentamiento y a dos sujetos, en motocicleta, efectuando disparos.
Por el momento, no hay detenidos ni imputados. No obstante, los investigadores creen seguir pistas firmes y confían en que habrá resultados en las próximas horas.
Una larga pelea
En lo hondo de las barriadas que se vuelven vecinas en la avenida De los Sauces, hacia un lado Talleres Sur y hacia el otro José Ignacio Díaz, lo que resuena es una alarma que conmociona más de lo que preocupa.
“Ya estamos acostumbrados a este tipo de violencia. Cada dos por tres se agarran a los tiros, y cuando la Policía intenta perseguir a las bandas, también los reciben a los tiros”, confesó un referente de peso entre los grupos vecinales que se organizan en la zona.
Desde el centro vecinal, también se refirieron a la problemática de la violencia y la inseguridad.
“Hay un asentamiento al lado de la sede de una reconocida empresa de telefonía que se convirtió en un aguantadero. Roban a toda hora y se escabullen por el barrio. Cuando alguien se queja, lo reciben a golpes y balazos”, dijeron.
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También reconocieron que la presencia policial es constante por las arterias. “Las patrullas circulan. Y si bien no lo hacen a toda hora, se nota su presencia en el lugar. Las bandas aprovechan los momentos en que desaparecen”, dijeron.
En relación con la última víctima fatal, los referentes vecinales dijeron no conocer al herido que luego murió en el hospital.
Y, sobre la pelea, algunas versiones aseguraron que podría tratarse de una disputa entre facciones de una barra brava de un equipo del fútbol cordobés, mientras que otros sostuvieron que son bandas que se disputan el control del narcotráfico, una actividad que, según los vecinos, se impuso en la zona.
“Hay un búnker de drogas cada dos cuadras. En esa esquina, hay al menos dos puntos de venta de drogas”, especularon los vecinos sobre el lugar donde se produjeron las agresiones.
También alertaron sobre otra preocupación: “Los niños juegan en la calle y en esta zona hay muchas fiestas clandestinas que terminan a cualquier hora. Tenemos que entrar a nuestros hijos a las corridas cuando se agarran a las trompadas, cuando salen de esas casas no habilitadas”.
Lejos de creer que tras los últimos hechos de sangre las cosas volverán a un estado de tranquilidad, en la barriada esperan lo peor: “Estamos todos encerrados porque no hay Policía y se van a volver a agarrar”.