Un terrible hecho conmocionó en las últimas horas a la localidad de Machagai, provincia de Chaco. Un joven de 25 años fue hallado sin vida luego de haber permanecido tres días desaparecido.
Se trata de Alejandro Emanuel Meza. Los investigadores sostienen que fue engañado, secuestrado y posteriormente asesinado de un disparo tras realizar una venta de una pulsera de oro a través de internet. Dos personas ya fueron detenidas por el hecho.
Según los medios locales, Meza desapareció el sábado. Su madre realizó la denuncia ante la falta de noticias sobre su paradero. La comisaría local activó el protocolo de búsqueda de personas.
La investigación, a cargo de la fiscalía en turno y la División Investigaciones de Sáenz Peña, entrevistó a familiares y allegados. El hermano de Alejandro, Marcos Meza, aportó datos cruciales. Relató que 15 días antes, Alejandro había comprado a un hombre llamado Eduardo una pulsera de oro con un dije en forma de cruz por $150.000.
Posteriormente, Alejandro publicó la pulsera en redes sociales para revenderla a un precio mayor. Una persona se contactó con él para comprarla y acordaron encontrarse en la casa del padrastro de Meza. Según el hermano, el comprador solo adquirió la pulsera, sin el dije, por un valor total de $300.000.

Sin embargo, el sábado, el comprador volvió a contactar a Alejandro para pedirle la medallita (el dije). Acordaron encontrarse nuevamente en el mismo lugar, pero desde ese momento no se supo más nada de Meza y únicamente se encontró su moto.
Gracias al testimonio de un hombre, los investigadores determinaron que el supuesto comprador y otro hombre habían secuestrado a Alejandro. Este testigo agregó que lo metieron dentro de un auto Renault Logan, lo cual fue corroborado por cámaras de seguridad de la zona.
Con estos datos, se realizaron rastrillajes en las inmediaciones de la calle Carlos Gardel, donde encontraron el auto utilizado para llevarse al joven. También se solicitó la apertura de antenas del teléfono de la víctima para rastrear sus últimos movimientos.
La Fiscalía N° 1 de Sáenz Peña, a cargo del fiscal Cesar Collado, ordenó la detención de dos personas. El martes, la Policía detuvo a los sospechosos: un hombre de 35 años y otro joven de 21.

El mayor de los detenidos confesó haber asesinado a Alejandro de un disparo, mientras que el otro declaró que ayudó a esconder el cuerpo. A raíz de estas declaraciones, los investigadores se trasladaron a un camino vecinal del Pueblo Viejo, donde hallaron un revólver calibre .38 largo. Poco después, la Policía encontró el cuerpo de Meza a la vera del camino vecinal de Colonia Uriburu.
En el lugar del hallazgo trabajó personal de la fiscalía y el Gabinete Científico para realizar las pericias. Frente a este escenario y con las declaraciones de los sospechosos, el fiscal Collado los imputó por homicidio agravado.