Con total impunidad, el joven llegó caminando en medio de la oscuridad, pateó la puerta de la casa y, arma en mano, entró. Su expareja comenzó a gritar. Fue entonces cuando el recién llegado apuntó contra un hombre que estaba en la vivienda y le descerrajó un balazo a quemarropa en la entrepierna. Sucedió en la noche del lunes en barrio Blas Pascal, al noroeste de la ciudad de Córdoba. El herido quedó internado.
En barrio Centro, dos hombres comenzaron a pelear a metros del Mercado Norte. Uno de ellos sacó un cuchillo y se lo terminó clavando al otro en el cuello. Luego, escapó corriendo. Un taxista se apiadó, frenó, cargó al herido y lo llevó hasta el Hospital de Urgencias. En la terapia intensiva, la víctima sigue internada. Sucedió también el lunes a la noche.
En barrio San Roque, un joven terminó herido de un balazo en la pierna izquierda. Iba por la calle y fue emboscado por dos individuos que, tras acorralarlo y robarle algunas pertenencias, le descerrajaron un balazo como una despedida. La víctima terminó en el hospital Madre Teresa de Calcuta. Los agresores escaparon. Sucedió en la madrugada del martes.
Violencia en Córdoba: los casos
Estos tres episodios ocurrieron en un puñado de horas y sirven para graficar la preocupante secuencia de violencia que se registra y se padece en la ciudad de Córdoba, como así también en otros puntos de la provincia. Son casos que lejos están de ser aislados. Por el contrario, se agregan a una cadena de violencia sin freno.
En lo que va de este 2024, ya se cometieron al menos dos asesinatos en la provincia de Córdoba, al tiempo que numerosas personas han terminado heridas a causa de disparos, de puntazos o de golpes.
Uno de los crímenes fue el caso de un joven que mató a golpes a su madre en Alta Gracia, mientras que el otro episodio fue el de un hombre que, tras haber salido de la cárcel, encontró a un rival en la calle, quien también había estado preso, y lo ejecutó a balazos en barrio Ciudad Evita, de la capital cordobesa.
Ciudad Evita, la misma barriada donde una comisaría fue atacada a tiros en dos oportunidades y en pocos días, durante este enero que recién ha arrancado.
La ola de violencia preocupa. En realidad, es una extensión de la violencia que se padeció durante todo 2023 en la provincia de Córdoba.
Registros oficiales dan cuenta de que en el año que pasó se cometieron al menos 111 asesinatos en la provincia.
Dicho de otra manera: una persona fue asesinada de manera intencional cada tres días.
Más de la mitad de los casos estuvieron encuadrados en lo que se conoce como “violencia urbana”: es decir, peleas, ataques y venganzas.
Se trata de un fenómeno social que no deja de expandirse y que consiste en la resolución de conflictos entre personas (generalmente conocidas entre sí) ya no por la palabra o por la justicia, sino con un arma de fuego cargada o un cuchillo.
En muchos de esos casos estuvo la droga detrás: ya sea como matriz del conflicto, ya sea porque los autores estaban bajo sus efectos.
Los 111 asesinatos que dejó 2023 superan a los registros de años anteriores. En 2022 se habían cometido 97 asesinatos, mientras que en 2021 los casos habían sido 88 en la provincia, según informes del Observatorio del Delito, ente que depende del Ministerio de Seguridad de Córdoba.
La segunda causa de muerte intencional, en tanto, fueron hechos de inseguridad: al menos 20 personas murieron en el marco de robos, tanto víctimas propiamente dichas como sospechosos de robo abatidos.
En tercer lugar estuvo la violencia de género: se cometieron al menos 15 femicidios en toda Córdoba.
La mayoría de los episodios tienen sus causas más que avanzadas con sus sospechosos identificados y detenidos, principalmente.
Seguidilla imparable de violencia
El fin de 2023 fue muy complejo. Diciembre registró al menos siete asesinatos en Córdoba.
De hecho, en los últimos días del año se registró una preocupante secuencia: una mujer fue ultimada a puñaladas en su casa de Villa María y el caso sigue impune; en Salsipuedes, y frente a sus hijas, otra mujer fue asesinada a puntazos por su expareja, quien quedó detenida; en Traslasierra, un paramédico fue ultimado a mazazos en las afueras de su casa y hay una pareja presa, mientras que en Pozo del Molle, tras desayunar en un bar, un hombre fusiló a otro con pistola y se entregó a la Policía.
“Fue un mes bravo con hechos de violencia de todo tipo y en distintos lados. Todos dejan en evidencia una violencia que no para”, comentó una alta autoridad policial.
En 2024, como se dijo, ya se cometieron al menos dos asesinatos.
El último sucedió el viernes 5 en Ciudad Evita y tuvo por víctima a Franco Alejandro Torres, de 29 años.
Aquella noche, fue atacado por otro hombre que le descerrajó tres disparos a quemarropa y en medio de una calle. No le importó ser visto por testigos. Torres fue trasladado por varias personas hasta el dispensario local, pero no quedaba nada por hacer. Murió allí mismo.
Familiares de la víctima declararon que el autor de los disparos es un tal “Pelado” y que escapó en un Mégane.
Los investigadores andan tras los pasos de Armando Tobares, pero, por ahora, no han podido dar con él.
Fuentes oficiales señalaron a La Voz que víctima y sospechoso se conocen desde hace años y que tuvieron un enfrentamiento por una casa. Ambos terminarían cayendo preso por distintas circunstancias.
La sospecha es que, tras haber recuperado la libertad, se volvieron a encontrar y la diferencia quedó zanjada con disparos de pistola.
Armas en manos de cualquiera
No deja de causar alarma en Córdoba la facilidad con que se siguen consiguiendo armas de fuego.
Pistolas y revólveres siguen siendo los elementos más usados por simples personas para quitar la vida.
Hace un par de horas, en la villa Vaquita Echada, dos hombres acabaron baleados e internados en el marco de una pelea con otras personas no identificadas.
En Río Cuarto, en tanto, otros dos hombres fueron baleados días atrás. Uno de ellos fue atacado por otro que huyó en moto. El herido está internado y pelea por su vida.
Las armas siguen siendo un serio problema en Córdoba.
En ese marco, no dejan de repetirse graves asaltos callejeros cometidos por ladrones armados.
Mientras tanto, y como se indicó en La Voz, en el Ministerio de Seguridad de Córdoba continúa el diseño de un plan de desarme civil a cambio de dinero. El programa se lanzaría en marzo próximo.
