Internado en la terapia intensiva del Hospital de Urgencias, recuperándose de una operación y con pronóstico reservado. Así se encuentra un joven de 17 años que, en las últimas horas, recibió un balazo a quemarropa por parte de dos individuos que llegaron y escaparon en moto. No le robaron nada. ¿Los motivos? Nadie lo tiene claro, y quienes lo saben no lo dicen. Menos a la Policía.
Las víctimas podrían haber sido más si se tiene en cuenta que el domingo a la tarde había varias familias a esa hora en la plaza de barrio Estación Flores, en la zona sudoeste de la ciudad de Córdoba.
Lo ocurrido en calle Estocolmo al 4600 está lejos de ser un hecho aislado, sino que se agrega a una imparable serie de episodios de violencia urbana que se registra desde hace varias semanas en distintos puntos de la ciudad de Córdoba.
De hecho, la Capital no es el único escenario de estos casos, sino que en varios puntos del interior no cesa la sucesión de serios casos.
Peleas, venganzas, ajustes, represalias vienen repitiéndose uno tras otro y con serios saldos de víctimas.
Ya hubo homicidios en pocos días.
En una fiscalía de la Capital, por caso, continúa la investigación para determinar cómo fue que, el pasado miércoles, murió un hombre de 70 años en barrio Granja de Funes II, luego de que un grupo de vecinas atacó su casa a pedradas.
Mientras tanto, en otra fiscalía prosigue la pesquisa para determinar cómo fue que un automovilista mató a otro, la semana pasada, de una puñalada en el corazón tras una pelea de tránsito en barrio Las Palmas.
Sin contar que en otra fiscalía avanza el sumario por un crimen en una fiesta en Villa El Libertador. En 2022, ya hubo al menos seis crímenes tras fiestas.
Actualmente, en este cuadro de situación, en otras dependencias judiciales continúan las pesquisas en torno a graves casos de violencia urbana que han terminado con personas heridas: el caso de una joven que, ajena a todo, recibió un balazo en el rostro por parte de dos hombres que, en una aparente venganza narco, perseguían a otros a los tiros en barrio Las Violetas; o el caso de otra chica que, en un baile de cuarteto en el club Las Palmas, recibió una puñalada en el abdomen por parte de un sujeto que andaba con un cuchillo especial de hoja curva.
“No para... No para lamentablemente la ola de casos de violencia urbana. Es preocupante. Hay mucha pelea, muchos heridos, muchos hechos graves”, le dijo a La Voz una alta autoridad policial, quien agregó: “Hasta hace un tiempo, vos veías peleas o ataques por drogas o de gente alterada por sustancias; hoy, ya no es sólo eso. Tenés peleas con heridos en cualquier situación y con gente sin haber consumido nada”.
“Efectivamente, es preocupante. Hay mucho desprecio por el otro. Mucha violencia se está viendo. Sin contar que no sé de dónde salen tantas armas”, indicó otra fuente policial.
“La violencia urbana viene en ascensor. Sube y sube”, reconoció una fuente gubernamental.
Apuñalada tras pelea de tránsito
A todo esto, la Policía continúa en la búsqueda del automovilista que, en la noche del domingo, apuñaló a una mujer que iba en otro coche, en el marco de una discusión de tránsito en la Costanera de Córdoba.
La víctima, una joven de 29 años, recibió un puntazo en un hombro y debió ser atendida en un instituto privado de barrio Villa Urquiza.
Sucedió en Costanera y calle Jujuy, a pocas cuadras del Centro, y todo habría sido culminación de una discusión de tránsito entre dos hombres. Una mala maniobra de autos. Uno quiso apuñalar a otro e hirió a la acompañante, y escapó.
Un violento episodio sucedido pocos días después del caso del conductor que mató a otro con cuchillo.
Ricardo Jatuff permanece preso por homicidio simple en la cárcel de Bouwer, mientras se espera que se le realicen peritajes; y se defienda.
A todo esto, conviene recordar que, semanas atrás, otro automovilista fue hasta la casa de otro para herirlo a balazos en sus piernas como venganza, tras una discusión de tránsito que se había iniciado en el estacionamiento del colegio de sus hijos.
Peleas y más peleas
El fin de semana, en tanto, una violenta pelea entre dos bandos de jóvenes en barrio Villa Urquiza terminó con un adolescente internado, tras haber sido patoteado en el piso.
Mientras, en barrio La Floresta, periferia este de la Capital, se produjo otra furibunda pelea entre jóvenes en la calle. Se vieron armas de fuego.
A todo esto, pasajeros que iban en un colectivo vieron cómo la unidad era atacada a pedradas.
Fuentes oficiales señalaron, a todo esto, que hubo otros dos episodios con colectivos dañados a pedradas, el fin de semana, en Capital.
Donde también hubo armas de fuego, fue en barrio Yofre.
Noches atrás, hubo disparos de pistola desde una Ford Ranger contra un grupo de jóvenes que estaban jugando al fútbol en un predio. Fue en calle Chachapoyas al 1800. No hubo heridos.
Ataque en Morteros
A todo esto, la Justicia trabaja para identificar y atrapar a los miembros de una patota que, en la noche del domingo, atacó a tiros a dos personas en una vivienda, como parte de una venganza por motivos que no están claros.
Una de las víctimas terminó con disparos en sus piernas y debió ser hospitalizada.
La turba incendió una vivienda.
Balazos y venganzas en barras de clubes
En la seguidilla de episodios de violencia urbana, sobresalen también los ataques a balazos a referentes de barras de clubes de fútbol.
En Belgrano ya hubo amenazas y ataques a viviendas y hasta en un bar, hecho que dejó un herido.
Por el lado de Talleres, días atrás fue baleada la casa del líder de “La Fiel” (Darío Cáceres, preso). Jornadas atrás fue baleado en sus piernas otro miembro de la barra: Walter “el Toro” Aguilera.
