Mientras el consumo masivo de alimentos y bebidas en Argentina muestra signos de estancamiento, el mercado de electrodomésticos y tecnología experimenta un crecimiento exponencial, transformándose en uno de los sectores más dinámicos de la economía.
Un relevamiento privado revela que, en el acumulado de enero a mayo, el sector de electrodomésticos evolucionó un impresionante 41%, una cifra que contrasta fuertemente con el modesto 0,5% de crecimiento del consumo masivo en el mismo período del año pasado.
Más ventas online que en comercios físicos
Este auge está fuertemente apalancado por el canal online, que se ha consolidado como el motor principal de las ventas. Actualmente, el comercio electrónico representa el 56% de las unidades vendidas y el 46% de la facturación en el rubro de electrodomésticos y tecnología.
Argentina se posiciona como el tercer país con mayor participación de este canal de venta en ambos rubros, solo por detrás de Brasil y Chile.
La incorporación del teléfono celular como medio de compra y venta es crucial, con un 63% de los encuestados afirmando utilizar su dispositivo móvil para comprar online.

Factores clave detrás del crecimiento explosivo
Según Milagros Bin, Customer Success Lead en NielsenIQ, esta recuperación se explica por una combinación de factores macroeconómicos y comerciales que han generado un “cambio significativo” en los hábitos de consumo dentro del sector, según publica Ámbito.
Entre los motivos más destacados se encuentran:
- Desaceleración de la inflación y recuperación del poder adquisitivo.
- Mayor financiación y acceso al crédito, con la reaparición de cuotas sin interés y tasas más bajas.
- Mejora en el surtido de productos disponibles.
- Desaceleración en los precios del rubro “Electro”, haciéndolos más accesibles.
Los datos de NielsenIQ muestran que, mientras la inflación ha ido disminuyendo (3,7% en marzo, 2,8% en abril, 1,5% en mayo), los salarios han subido (2,5% en marzo, 3,2% en abril y mayo) y, crucialmente, los precios de los productos de electrodomésticos han bajado significativamente (una caída del 4,6% en marzo, 3,3% en abril y 1,1% en mayo).
Este ajuste de precios a la baja ha sido un incentivo clave para los consumidores.
Los productos estrella del boom
El detalle de las ventas por categoría refleja un dinamismo particular:
Línea Blanca:
- Experimentó un crecimiento del 61% de enero a mayo de 2025 en comparación con el mismo período de 2024.
- Las heladeras lideraron con un aumento del 90% en ventas, destacándose las No Frost con un crecimiento del 143% y representando el 57% de la facturación.
- Otros productos como los secarropas vieron una suba del 251% y los freezers del 94%. Además, el 34% del surtido son ítems nuevos, gracias a la apertura comercial.
Pequeños Electrodomésticos:
- Este segmento también mostró un fuerte incremento.
- Las freidoras se vendieron un 367% más, mientras que las aspiradoras y cafeteras registraron un aumento del 72%.
- El segmento “Robot” se posicionó como el segundo más vendido en unidades.
Tecnología (IT):
- Las notebooks marcaron una suba del 94% en unidades, impulsadas por productos con precios inferiores a u$s400.
- Las computadoras de escritorio subieron un 160%, con el segmento gaming representando el 50% de la facturación de la categoría.
- Los celulares son la categoría más vendida en unidades y facturación dentro del sector IT, con un aumento del 46% en unidades. Los dispositivos con precio promedio superior a u$s400 ganaron 5 puntos de participación, y el 50% de los modelos vendidos en 2025 son ítems nuevos.
- Las ventas de televisores crecieron un 42% en unidades, motorizadas por el rango de 54 a 60 pulgadas, con un 38% de los modelos vendidos en 2025 siendo nuevos.
Milagros Bin enfatiza que este fenómeno no está necesariamente ligado a una acumulación de stock de años anteriores, sino que responde a una “cuestión macroeconómica” que favorece el consumo de bienes durables.
Una dinámica distinta al consumo masivo
Es crucial no confundir este auge con el comportamiento del consumo masivo (alimentos, bebidas), que funciona bajo una lógica diferente. En este último caso, el canal online sigue teniendo un peso muy bajo, representando apenas el 10% de las ventas globales, y no es el motor de crecimiento actual. Por lo tanto, aunque se observe una cierta debilidad en supermercados o almacenes, esto no implica una migración masiva hacia el online en consumo masivo, lo que marca una clara dualidad en el panorama de consumo argentino.