Los celulares, esos dispositivos que se convirtieron en una extensión de nuestras vidas, podrían estar cerca de su fin, según Elon Musk.
El visionario empresario, conocido por liderar Tesla, SpaceX y Neuralink, reveló que los smartphones serán reemplazados por una tecnología revolucionaria: implantes cerebrales desarrollados por una de sus compañías. Esta innovación promete eliminar la necesidad de pantallas y dispositivos físicos, permitiendo a los humanos interactuar con el mundo digital directamente desde sus pensamientos.
Neuralink: el futuro sin celulares
El anuncio, que generó revuelo en redes sociales y medios especializados, se basa en los avances de Neuralink, una empresa enfocada en crear interfaces cerebro-computadora. Musk aseguró que esta tecnología no sólo hará obsoletos a los celulares, sino que transformará radicalmente nuestra forma de comunicarnos, trabajar y entretenernos.
“Imaginen navegar por internet, enviar mensajes o controlar dispositivos con sólo pensarlo”, afirmó el magnate en una de sus recientes declaraciones.
El dispositivo en cuestión es un implante neuronal de apenas 23 milímetros de diámetro y 8 milímetros de grosor, equipado con 1.024 electrodos distribuidos en hilos ultrafinos. Estos se insertan en el cerebro mediante un robot quirúrgico y detectan señales eléctricas generadas por los pensamientos, convirtiéndolas en comandos digitales transmitidos de forma inalámbrica.
Los ensayos, que ya han sido exitosos en animales y en un paciente humano, Noland Arbaugh, demuestran que esta tecnología está más cerca de lo que parece.
Un cambio de paradigma tecnológico
La visión de Musk no es nueva, pero sus predicciones ganaron fuerza con los avances concretos de su empresa. En un mundo donde gigantes como Mark Zuckerberg apuestan por gafas de realidad aumentada y Bill Gates explora tatuajes inteligentes, Musk lleva la apuesta un paso más allá al eliminar por completo la necesidad de dispositivos externos. “Los celulares serán un recuerdo del pasado”, señaló, destacando que la conexión directa entre mente y máquina será “una extensión natural de la humanidad”.
Sin embargo, este futuro no está exento de desafíos. Expertos señalan que la tecnología enfrenta obstáculos técnicos, como la precisión de los implantes, y dilemas éticos, como la privacidad de los datos mentales. A pesar de esto, Musk se muestra optimista y confía en que esta nueva tecnología no sólo revolucionará la comunicación, sino que también ayudará a personas con discapacidades a recuperar funciones perdidas.
Cuándo veremos este cambio
Aunque no hay una fecha exacta para la desaparición de los celulares, los avances sugieren que podríamos estar a una década de ver esta tecnología en uso masivo.
Mientras tanto, los smartphones siguen reinando, pero el futuro que Musk imagina podría estar más cerca de lo que pensamos.