En julio de 2023, cuando el protocolo World se presentó al mundo, lo hizo con una premisa ambiciosa: redefinir la identidad digital en un entorno saturado de bots, inteligencia artificial (IA) y perfiles falsos.
Hoy, esa visión empieza a concretarse. Es que más de 14 millones de personas fueron verificadas como humanas únicas en más de 20 países, mediante una tecnología basada en Prueba de Humanidad (PdH).
World App, la aplicación que centraliza estas funciones, ya superó los 30 millones de usuarios, con 24 millones activos diariamente, quienes no solo realizan transacciones financieras seguras sino que también chatean, juegan y acceden a servicios exclusivos con otros humanos verificados. Con más de 100 mini apps integradas, también se consolida como una verdadera super app de personas reales.
Argentina, un nodo clave del crecimiento global
En América Latina, Argentina se destaca como uno de los países con mayor adopción de World. Ya hay más de 4,8 millones de cuentas creadas en la app y 2,5 millones de personas verificadas.
“El ecosistema tecnológico argentino y su talento humano convierten al país en un lugar estratégico para escalar esta infraestructura”, señaló Martín Mazza, gerente regional de Tools for Humanity, la empresa colaboradora de World.
Además de su expansión global en áreas como finanzas (Visa), citas online (Tinder) y videojuegos (Razer), en Argentina se sumaron alianzas con Krü esports y Rappi, dos marcas locales con fuerte presencia entre los jóvenes.
Una nueva infraestructura para una internet más confiable
En plena era de la inteligencia artificial, donde las imágenes falsas, los deepfakes y los perfiles automatizados se multiplican, World propone un cambio de paradigma. Una Internet donde cada identidad pueda ser verificada como humana, sin comprometer la privacidad ni compartir datos personales sensibles.
Con su sistema World ID, el protocolo establece un nuevo estándar global de confianza digital, que permite a las personas navegar, interactuar y crear con la seguridad de que hay un ser humano único al otro lado de la pantalla.
“Cada vez es más evidente la necesidad de contar con una prueba de humanidad a escala”, resumió Mazza.