Opinión
Fraternidad religiosa. De suciedades y limpiezas
Si quienes lideran no están fichados como “personas capaces y respetables, temerosas de Dios, gente honesta”, la ley se ensucia.
Si quienes lideran no están fichados como “personas capaces y respetables, temerosas de Dios, gente honesta”, la ley se ensucia.