Lo que comenzó como una simple jornada de exploración en la playa terminó en una historia viral. Un joven brasileño que se dedica a buscar objetos perdidos con un detector de metales encontró un iPhone 13 enterrado bajo la arena y, sorprendentemente, el dispositivo seguía funcionando.
Canal especial virales de La Voz
El protagonista es Mateus Natan da Silva, de 27 años, conocido en redes sociales por compartir sus hallazgos en distintas playas de Santa Catarina. Su objetivo declarado es alcanzar R$ 1 millón con los objetos que encuentra y vende, aunque esta vez decidió devolver el tesoro.
El descubrimiento ocurrió el 19 de septiembre en Balneário Camboriú, pero Mateus publicó el video días después y rápidamente se viralizó. En las imágenes, se lo ve emocionado al notar que el celular estaba intacto pese a haber pasado tiempo bajo la humedad.
La dueña era Isadora Alchieri, una joven de 23 años de Capanema, que no podía creer la noticia. “¡Fue una sorpresa que nunca esperaba! Ya había renunciado al móvil, llegué a comprar otro. Lo perdí el martes por la noche y el sábado empezó a aparecer una multitud buscándome”, contó al portal G1.
Mateus relató que lo primero que hizo fue intentar revivir el teléfono: “Lo dejé dos días sumergido en arroz y luego lo puse a cargar”. Para localizar a la dueña, recurrió a la creatividad. Colocó el chip en otro dispositivo, intentó enviar dinero a través de una billetera virtual y así logró descubrir el nombre de la propietaria.
Isadora, agradecida, contó que pensaba regalarle el teléfono recuperado a su padre, ya que ella había comprado uno nuevo.
El cazador de tesoros acumula miles de seguidores por sus hallazgos, que incluyen anillos, collares y monedas. Según dijo, ya lleva recaudados R$ 22 mil en su camino hacia la meta del millón. Pero, más allá de los números, esta historia le valió algo que no se compra: el reconocimiento de miles de usuarios por su honestidad.
