Un trabajador de una empresa de transportes fue despedido y detenido luego de que una compañera encontrara un celular oculto en el baño unisex con la cámara encendida. El dispositivo fue descubierto cuando la mujer escuchó música proveniente de los auriculares conectados al teléfono.
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El hecho ocurrió en Luziânia, una ciudad del estado de Goiás, Brasil, a unos 60 kilómetros de Brasilia. La empleada se encontraba en el baño cuando notó que el sonido provenía del lavatorio. Al revisar, encontró el teléfono envuelto en papel de diario y cartón, con la cámara apuntando hacia el interior del baño.
Inmediatamente, alertó al supervisor de la empresa, quien identificó al dueño del dispositivo y contactó a la policía.
La “justificación” del acusado
Según informaron fuentes policiales, el hombre declaró que había dejado el teléfono en el baño con la intención de “comprobar que otros compañeros hacían algo malo, como consumir drogas”. Cuando las autoridades le consultaron si sabía que el baño era unisex, él confirmó que sí.
El trabajador fue trasladado a una comisaría, aunque recuperó la libertad poco después. Sin embargo, deberá enfrentar una investigación por presuntas grabaciones no autorizadas de intimidad sexual.
Por el momento, las autoridades no han podido acceder a los archivos del celular, ya que necesitan una orden judicial. Dependiendo del material que se encuentre en el dispositivo, la carátula del caso podría agravarse y el hombre enfrentaría cargos más severos.
Mientras tanto, la empresa informó que la empleada que descubrió el celular está recibiendo acompañamiento psicológico.
